“Las pequeñas y medianas empresas siempre hacen un esfuerzo extra por retener al personal y al emprendimiento productivo aún en momentos de crisis. Por eso lamentamos la actitud de las empresas multinacionales, que dejan en la calle a sus operarios cuando les está yendo mal”, dijo ayer el presidente de la Confederación Argentina de la Mediana Empresa (CAME), Fabián Tarrío. El dirigente se refirió de esa manera a los 600 despidos dispuestos por la alimenticia Pepsico al anunciar el cierre de una planta en el partido de Vicente López. “Las pymes retienen personal porque la cercanía con el trabajador genera un entorno familiar. Además, invierte mucho dinero en su capacitación y los costos de un potencial litigio son muy grandes”, agregó Tarrío.