Cuando parecía que el acuerdo entre los representantes de Mefro Wheels y Cirubon para retomar la producción de la fábrica de llantas se caía, la presión de los trabajadores, acompañados por el gremio metalúrgico, torció la situación abriendo un nuevo escenario respecto a la resolución del conflicto laboral. Las partes decidieron traer el concurso, que había sido rechazado por la justicia porteña, a los Tribunales provinciales para implementar el convenio original consistente en el alquiler de la planta ubicada en Ovidio Lagos al 4400 por parte de la autopartista de Villa Gobernador Gálvez, que a pesar de todos los contratiempos, cuenta con un fuerte compromiso de la provincia para su implementación. "Logramos volver a fojas cero y que la convocatoria se haga en Rosario, eso nos dará la seguridad de poder tenerla más controlada, y que en 30 o 40 días Mefro va a estar funcionando normalmente", dijo el secretario general de la UOM, Antonio Donello, al explicar los resultados de la reunión.

Momentos de tensión se vivieron ayer a la mañana en la puerta del hotel céntrico donde estaba alojado Wolf Waschkhun, el representante del fondo que controla Mefro Wheels. El ejecutivo alemán había almorzado el lunes con el gobernador Miguel Lifschitz y el ministro de la Producción, Luis Contigiani para explicarles los alcances del acuerdo. A la noche, tenía pensado encontrarse con Ricardo Cicarelli, titular de Cirubon, pero como las negociaciones se empantanaron, el empresario local desistió de la convocatoria y amagó con bajarse de la operación porque, comentó, les habían cambiado determinadas condiciones.

Cuando Waschkhun estaba en el lobby del hotel con las valijas preparadas para retornar a su país, luego de explicar que los titulares de la autopartista regional daban un paso al costado, un grupo de trabajadores de Mefro junto a directivos de la UOM se plantaron en la puerta y cortaron el tránsito por calle San Lorenzo para exigir una respuesta. El abogado del gremio, Pablo Cerra, se comunicó con Cicarelli y le pidió que fuera hasta el hotel para aclarar la situación. "Hace seis meses que estamos así, de acá no se va nadie", se quejó uno de los trabajadores.

El empresario, junto a su abogado, arribaron al lugar y mantuvieron un encuentro con el alemán. Finalmente, descomprimieron la situación al acordar traer el concurso a Rosario y de esa manera retomar las negociaciones como estaban planteadas hasta el momento. "Nos habían convocado para informarnos que se había caído el acuerdo, pero pudimos lograr lo que originariamente pedíamos, que el concurso se presente en Rosario, inclusive lo van a llevar adelante los propios apoderados de Cirubon para controlar y tener la seguridad jurídica para que no nos  defrauden", explicó Cerra a los trabajadores, quienes minutos más tarde decidieron levantaron el corte.

Por su parte, Contigiani volvió a cuestionar la postura del gobierno nacional, en este caso a través del diputado nacional José Nuñez, por la demora en el pago del subsidio comprometido a los trabajadores cuando se anunció el acuerdo entre Cirubon y los alemanes en la sede de la UOM. Además, el ministro criticó al legislador de Cambiemos porque no cumplió con la promesa de interceder ante las terminales nacionales para que vuelvan a comprar las llantas fabricadas en la planta rosarina.

El titular de la cartera productiva provincial, cuyos equipos técnicos integran junto a la Federación Industrial de Santa Fe (Fisfe) el Observatorio de Importaciones, precisó que en el primer semestre de este año ingresaron 337.971 llantas de acero como las que se fabricaban en Mefro Wheels, cuando en el 2015 y el 2106 no entró una sola unidad. "Si hubiera voluntad política de Nación, la fábrica volvería a producir", aseguró Contigiani.