La División Delitos Ambientales de la Policía de la Ciudad clausuró un frigorífico en el barrio porteño de Mataderos, debido a que el establecimiento no contaba con la habilitación necesaria y desde su interior emanaban "olores nauseabundos" y se vertían desechos en la vía pública, informó el Ministerio Publico Fiscal de la Ciudad de Buenos Aires. La investigación fue realizada por la Unidad Fiscal Especializada en Materia Ambiental (Ufima), a cargo de Carlos Rolero Santurián, quien ordenó una inspección integral en un frigorífico ubicado en la intersección de las calles Pilar y Tapalqué.