Defendemos la decisión política del gobierno nacional de recuperar un modelo productivo y los conflictos internos del Frente de Todos no son un impedimento para llevar adelante la gestión.

Hay una decisión política que ha tomado el gobierno nacional, que más allá de los claroscuros que puedan existir en cualquier gobierno, es absolutamente central, y es la de volver a un modelo industrial. Esto no significa dejar de lado al campo, yo siempre digo que acá no se trata de un antagonismo entre campo e industria, sino de que la Argentina aproveche inteligentemente todos los recursos que tiene. Sí en lo que hace a constituir un proceso de agregado de valor, que sustituya importaciones; un término que ya tenemos internalizado, porque significa trabajo argentino. 

Hoy hay sectores que están generando una enorme tracción, como la economía del conocimiento, la biotecnología, además de sectores tradicionales, como la metalmecánica, la industria del blanco, la textil. Ya no se trata solo de sustituir importaciones, sino que tenemos que pensar, en el marco de esta asociación entre campo e industria, diversificarlas. No podemos seguir exportando commodities, tenemos que ir a la generación de valor agregado. y para eso hay que constituir una fuerte alianza con las universidades nacionales, con el Conicet, con el Inta, el Inti, el Senasa, hay organismos que no se pueden percibir como compartimentos estancos, que tienen que trabajar de la mano en un proyecto de educación, de ciencia y tecnología, de industria, de desarrollo económico. solo así es sustentable un modelo económico que incluya a cada vez más argentinos y argentinas

Se está llevando a cabo un plan de estabilización que va a requerir un enorme esfuerzo. No obstante, no puedo dejar de señalar los condicionamientos que hay sobre la economía argentina. Muchos de los dólares que genera la Argentina se requieren para el pago de vencimientos de una deuda que fue reestructurada, que no fue tomada por este gobierno sino por el anterior, y no sabemos donde están esos recursos. Sabemos que esto implica que haya una política que se ciña a afrontar ese endeudamiento. Escucho a muchos hablar de déficit fiscal, y parece que se olvidan del déficit fiscal financiero que nos provoca el endeudamiento, que además no se tradujo en obras de infraestructura.

Además, no podemos soslayar problemas actuales y por eso es que buscamos la salida. pero en el mientras tanto, mientras llevamos adelante obras estratégicas para el país que reviertan este modelo que nos ha llevado al subdesarrollo y nos pongan no solo a autoabastecernos, sino en otra etapa a exportar gas.

Hay que recomponer salarios, como planteó hace ya bastante tiempo Cristina Fernández de Kirchner, hay que alinear los salarios y las jubilaciones con el precio de los alimentos, el costo de los alquileres, las tarifas, para recomponer el poder adquisitivo.  No hay posibilidad de que la economía argentina funcione si no se fortalece el mercado interno. El 75 % de la economía se explica por las pequeñas y medianas empresas que alimentan el mercado interno.

Asimismo, creemos que Santa Fe tiene la potencialidad para poner en agenda estos temas, y muchos dirigentes de los distintos partidos políticos capaces de propiciar un nuevo acuerdo democrático, que debe ser profundamente federal, pero al que debemos introducir nuestra identidad santafesina. Santa Fe tiene que ser protagonista.

María de los Angeles Sacnun 

Directora del Banco de Inversión y Comercio Exterior (BICE)