El intercambio de información tributaria con Estados Unidos alcanzará sólo a personas físicas y no a empresas. El envío de los datos fiscales comenzaría a llegar al país en 2024. Para eso la Argentina deberá validar los protocolos de seguridad informática antes de fin de año. El departamento del Tesoro de Estados Unidos publicó los puntos más relevantes del acuerdo.

Algunos especialistas en tributación consideraron, tras la publicación del informe, que el primer intercambio de información no se producirá antes de septiembre de 2024, en base a los datos del año calendario 2023, e incluso se especuló que podría extenderse un año más, dependiendo del cumplimiento de los protocoles de seguridad y confidencialidad.

El objetivo del Gobierno argentino de recibir información de los activos de los argentinos en Estados Unidos es poder ampliar la base imponible, considerando que una parte de estos fondos no se encuentra declarados. Se estima que hay unos 100 mil millones de dólares de residentes argentino sin declarar en esa economía.

A principio de diciembre el ministro de Economía, Sergio Massa, había informado de la firma de este convenio y en el mismo momento adelantó la posibilidad de avanzar en un blanqueo para darle la posibilidad a los individuos con cuentas no declaradas de traer esos fondos a la Argentina en el corto plazo.

En el último informe publicado por el Tesoro norteamericano se precisan parte de los alcances del acuerdo firmado con la Argentina. Se detalló que el intercambio de información será sólo para personas físicas (es decir individuos) y no estarán alcanzadas las sociedades.

Una de las dudas que persiste es si habrá datos que se informen en forma retroactiva. Según los especialistas, en el artículo 3 del documento se establece que la información a enviar se obtendrá a partir del año calendario de entrada en vigencia del acuerdo y todos los años subsiguientes.

A su vez, en el artículo 10 se menciona que el intercambio entrará en vigor a partir del primero de enero del año calendario siguiente a la fecha de la notificación por escrito de Argentina a Estados Unidos confirmando que se hizo el cumplimiento de los procedimientos internos necesarios.

Por estos motivos una de las interpretaciones es que la información a intercambiar no podrá ser del 2022 sino que corresponderá al año 2023 y que se enviará en septiembre del 2024. En este escenario, uno de los interrogantes que se generan es si continuará adelante la intención de aprobar un blanqueo y en el caso que ocurra cuál será el nivel de adhesión.

Blanqueo de capitales

En detalle, el régimen de exteriorización o blanqueo de capitales que el Palacio de Hacienda tiene en carpeta contempla una alícuota preferencial baja para la declaración de activos que se encuentran en el país o que se repatriarán al ser declarados, si se encontrasen en el exterior.

Además, se prevé la creación de un fondo específico "para la cancelación de la deuda con el Fondo Monetario Internacional", al cual se destinará el 20 por ciento de lo recaudado en el blanqueo.

El proyecto, denominado bajo el extenso título "Exteriorización del ahorro argentino para sostener el cumplimiento y cancelación de la deuda con el Fondo Monetario Internacional", establece una tasa mínima (ún no está decidido el porcentaje) para los capitales que se declaren y repatríen, o ya se encuentren en el país y permanezcan en él, que se exterioricen antes del 31 de marzo.

El doble de la cuota anterior se aplicará a los que se declaran entre el 1º de abril y el 30 de junio. Y de cuatro veces la alícuota base para los que se exterioricen en el tercer trimestre, 1º de julio al 30 de septiembre, siendo esta última fecha el plazo máximo para ingresar al régimen de blanqueo.