Con la imagen de luz del emblemático locutor y presentador Juan Alberto Badía detrás suyo, la diputada del Frente de Todos Gisela Marziotta reinauguró la obra "Badía iluminado", de Alejandro Marmo, en la rotonda de Bunge y Avenida del Mar, en Pinamar. A su alrededor, cientos de personas se congregaron con un "bocinazo" desde sus vehículos, o de pie para bailar temas de los Beatles, la banda favorita del afamado periodista argentino. “Estamos recordando a un ícono de la radiofonía y de la cultura argentina, quien es, además, un emblema para la ciudad de Pinamar. Badía fue una persona que apostó a construir el periodismo, con nuevas formas de hacer radio, generó puestos de trabajo y siempre colaboró en la difusión de los músicos y artistas de Argentina”, sostuvo Marziotta luego del acto, que se realizó a las 20:30 horas de este domingo. La iniciativa es parte de un recorrido cultural del Grupo Octubre que junto al artista Alejandro Marmo emplazan esculturas en hierro de distintas personalidades de la cultura popular argentina a lo largo y ancho del país. Todos los iluminados se encienden al caer la tarde como homenaje a estos grandes hombres y mujeres iluminadores. a Intersección Bunge y avenida del Mar era el espacio en el que se instalaba Juan Alberto Badía todos los veranos con su Estudio Playa 98.1 y desde el que transmitía su programa, que se transformó en un clásico de la ciudad balnearia. Algunos años después de su muerte, la radio estuvo a punto de cerrar, pero fue salvada por Guillermo “el Pelado” López, quien participó de la reinauguración este domingo y quien convocó a acompañar con el bocinazo. Uno de los momentos más emotivos de la tarde-noche fue cuando las personas que participaban del bocinazo bajaron de sus autos y se sumaron a quienes a la salida de la playa empezaron a bailar canciones de los Beatles, banda de la que Badía fue fanático desde muy joven. El conductor, que tuvo un rol clave en la promoción de bandas emblemáticas del rock nacional en la década del ochenta con su programa “Badía y compañía”, pudo cumplir el sueño de entrevistar a Paul McCartney y a George Harrison, dos de los cuatro fantásticos de Liverpool. La obra iluminada y la música de los Beatles fueron el homenaje perfecto para un hombre que siempre apostó por el arte.