En el mundo Onlyfans, hay un nombre que se repite seguido: “Yamil”. Le pertenece al fundador de Y. A. Management, una agencia de promoción que tiene su propia oficina en Palermo. Cuando alguien se inicia en Onlyfans y quiere darle un empujón a su cuenta, no hay duda de que tiene que hablar con Yamil. Es la Paquita Salas de los generadores de contenido porno en Onlyfans. Él mismo se ríe de eso.

La oficina, de hecho, recuerda bastante a la que tiene Paquita en la tercera temporada de su serie de Netflix: paredes rosadas, un escritorio sobre la alfombra, un sillón muy rococó. Ahí, Yamil se siente como pez en el agua. “Mis amigos me decían ‘¡la oficina no va más, todo el mundo trabaja remoto!’, pero para mí es importante que si vos me venís a ver, haya un lugar donde puedas sentirte cómodo y en confianza, en vez de ir a un bar y tener que bajar la voz porque estamos hablando de hacer porno. También le da un marco formal a algo que parte de la sociedad sigue mirando con malos ojos”.

Trabajo de hormiga

Para la mayoría de los generadores de contenido en Onlyfans, Twitter es la mejor vidriera. La red social del pajarito no prohíbe, de momento, la circulación de contenido porno. Cuanto más se retwittea un tráiler, más probable es que alguien quiera adquirir el video o suscribirse al perfil del protagonista. Sin embargo, esta promoción no es tarea fácil para los modelos que, además, tienen otras profesiones. Es ahí donde entra Yamil.

Él define a lo que hacen en Y. A. Management como “un trabajo de hormiga”. Efectivamente, promocionar el contenido de una cuenta de Onlyfans es “un trabajo diario. El beneficio a fin de mes se nota en la cantidad de seguidores en Twitter. Esa cantidad no siempre tiene una relación directa con la de los suscriptores en Onlyfans, pero la idea es que se relacione lo más posible”. Habla con conocimiento de causa: “Tuve varios trabajos, uno de ellos en una agencia de eventos y publicidad. Ahí adquirí conocimientos que hoy aplico en mi propia agencia”.

Hacer publicidad a gran escala, multiplicar la cantidad de retweets y asesorar al cliente con respecto a su contenido: esos son los servicios principales de Y. A. Management. “Tenemos diferentes tarifas, todo depende de lo que el cliente busque”, explica Yamil. “El objetivo es que les vaya bien, que tengan muchos suscriptores y puedan seguir creciendo, y la agencia a la par de ellos. En eso estamos desde hace casi dos años”.

Representante de estrellas

Al igual que el boom de Onlyfans, Y. A. Management tuvo su origen en la pandemia. “Mi amigo Gorka me dijo que necesitaba ayuda para gestionar la publicidad de su cuenta en Twitter, a través del sistema que nosotros llamamos RTxRT (retweet por retweet). Básicamente, es ponernos en contacto con otras cuentas para retweetearnos mutuamente el contenido y así lograr que llegue a más espectadores. Yo ni sabía cómo cobrar un trabajo así, pero, como estaba laburando desde casa y tenía más tiempo libre, acepté y me puse a practicar hasta que le agarré la mano. Me pareció fácil, rápido, y empecé a entender cuáles son las cosas que hacen crecer una cuenta”.

El boca a boca se encendió. “Varios generadores de contenido vieron cómo crecía la cuenta de Gorka y, a través de él, empezaron a contactarme para que les haga el mismo servicio. Enseguida empecé a trabajar con otra persona muy conocida en el mundo Onlyfans: Andrés Ivanoff, alias ‘El colo’. Yo ya lo tenía re visto y, desde el minuto cero, lo traté como a una estrella, con todo el cariño que eso merece. Es un efecto que suele darse: cuanto más ves el contenido de alguien, más famoso lo sentís y más te encariñás con lo que hace”.

De un momento a otro, Y. A. Management cruzó el océano gracias a las múltiples recomendaciones que circularon en grupos de whatsapp de modelos europeos. “Ahora tenemos clientes de todo el mundo: españoles, ucranianos, lo que se te ocurra”, cuenta Yamil. “Salió tanto trabajo de golpe que tuvimos que contener un poco el caudal. Vamos de a poquito, con mucho respeto a nuestra estructura actual, que es de catorce personas. Eso sí, puedo decirte que la facturación de la agencia supera ampliamente las expectativas que yo tenía al principio”. Se ríe: “¡Mi expectativa inicial era pagar el alquiler!”.

Las claves del éxito

El ojo experto de Yamil detecta “tres factores clave” para asegurar el éxito de una cuenta de Onlyfans. “Primero, el tiempo; no es que te hacés un perfil y al otro día facturás cinco mil dólares, es un proceso. Segundo, la suerte; puedo tener dos modelos con un contenido similar y que les vaya muy distinto. Y tercero, lo que le provoques a la cámara”. En este punto, Yamil se pone enfático: “Ganás más si hacés lo que te gusta. Dado que la exposición no es algo fácil, lo mejor es trabajar con lo que de verdad te genera placer, explorar tus morbos favoritos, algún fetiche. A largo plazo, eso te va a dar beneficios porque el contenido va a estar bueno, se va a notar que lo disfrutás”.

Curiosamente, el éxito no está ligado a un único perfil de modelo. “Represento a chicos que, además, tienen otras profesiones. Hay médicos, mecánicos, entrenadores, ¡hasta escritores! No hay un perfil específico porque todo el mundo puede hacer Onlyfans”, afirma Yamil. “Hay variedad de propuestas, gente que lo hace por placer o para generar un ahorro extra, y gente que se lo toma como un trabajo full time, con mucho profesionalismo. También están los que lo hacen a desgano y se frustran enseguida, porque no es un trabajo fácil; esos duran dos o tres meses”.

Oferta y demanda

En el último tiempo, la cantidad de cuentas activas de Onlyfans se multiplicó visiblemente. Basta explorar Twitter para comprobarlo. Hay más generadorxs de contenido que nunca, y la tendencia es creciente. La pregunta es si la cantidad de fans —es decir, de personas dispuestas a pagar una suscripción en dólares— crece proporcionalmente. Yamil opina que “los fans van migrando. Este mes se suscriben a una cuenta, dos meses después se suscriben a otra, y así. También hay fans nuevos, pero no tantos como quisiéramos”.

El desequilibrio entre la oferta y la demanda podría perjudicar la generación de contenido. Sin embargo, Yamil se muestra optimista. “Me parece que Onlyfans tiene para rato. También creo que hay que explorar otras plataformas porque, si bien Onlyfans es la más solvente, tiene varias limitaciones. Recordemos que, hace no mucho, los nuevos CEOs de la empresa amagaron con prohibir el contenido sexual explícito”. Es cierto, la prohibición casi se hizo efectiva a mediados de 2021, cuando el porno disponible en Onlyfans se abigarró exponencialmente. Para entonces, muchos modelos habían dividido su contenido entre otras plataformas, tanto para multiplicar sus ingresos como para contar con un back up en caso de que Onlyfans hiciera efectivas sus advertencias.

“La que funciona muy bien es JustForFans, que es un poco más difícil de manejar pero tiene mejores beneficios: para empezar, la misma plataforma te promociona”, explica Yamil. “Vos subís algo en JustForFans, le ponés un hashtag para categorizarlo y la plataforma se lo muestra a todos los interesados en esa categoría. Además, permite mostrar cosas que Onlyfans no, como fisting y lluvia dorada. Para el Team Morbos, JustForFans es la Meca”.

Un negocio que crece

“Onlyfans mueve mucho trabajo. Hay un montón de profesionales laburando: camarógrafos, editores de video, iluminadores, etc”, confirma Yamil. “No es que solo hay beneficios para quienes generan contenido”. Al transitar su segundo año en activo, Y. A. Management cuenta con un equipo de catorce personas y la perspectiva de seguir creciendo. “Primero sumé a mi novio. Hoy somos catorce personas trabajando dentro de Y. A., en su mayoría mujeres, mamás que no tienen tiempo para trabajar full time en una oficina. Nuestra actividad les da la posibilidad de laburar desde un teléfono, donde sea que se encuentren. Confío ciegamente en el equipo que tenemos”.

Entablar ese grado de confianza es también una preocupación para con los clientes. “Nuestros representados son, en su mayoría, varones gays o héteros que generan contenido porno para gays. Cuando nos empezaron a escribir chicas, me dio mucho vértigo. Queríamos ofrecerles un trabajo con toda sensibilidad y respeto. Con ellas empezamos a extender contratos para sentar los puntos principales del acuerdo: qué contenido va a circular, cómo y en qué condiciones. Todo, por supuesto, con consentimiento expreso y dentro del marco de la legalidad”.

El porno es tan diverso como quienes lo generan. En ese espectro infinito, Yamil, como espectador, tiene una preferencia: “¡Me gustan las historias! Mi contenido favorito es el que cuenta algo y explora fetiches con todo y disfraces: médicos, bomberos, profesores… Me gusta mucho que haya intro, pero eso para la promoción en Twitter puede ser un problema”, advierte. Y, para cerrar, deja un tip: “Vos tenés que conquistar a los posibles fans en lo que tardan en deslizar su dedo por la pantalla. Los trailers de Twitter tienen que ser cortitos, tirar mucha carne al asador, ¡pum!, ser explosivos. Después, en Onlyfans, les contás la historia como querés”.

Pueden contactarse con la agencia a través de Instagram: @y.a.management.