Las demandas para el 25 N fueron muchas y construidas colectivamente. Entre otros puntos, incluyeron: Aborto legal, seguro y gratuito; implementación del Plan Nacional contra la violencia, con el presupuesto adecuado. No queremos sólo refugios, queremos políticas integrales de atención, reparación, patrocinio y acceso a la justicia para las víctimas de violencia; libertad a Milagro Sala, presa política. También: Contra la justicia misógina que condiciona la vida de mujeres, niñas y niños silenciando sus voces, criminalizando a las mujeres que abortan, revinculando niñas y niños abusados por sus progenitores con los mismos, cajoneando las medidas de protección para víctimas de violencia machista; Aplicación del protocolo Interrupción Legal de Embarazo (ILE) en todo el territorio nacional; valoración de las tareas de cuidado, guarderías en los lugares de trabajo, extensión de las licencias por maternidad y paternidad; presupuesto y funcionamiento pleno del programa nacional de Salud Sexual y Procreación Responsable e implementación plena de la Educación Sexual Integral.