El secretario de Derechos Humanos de la Nación, Claudio Avruj, aseguró que “la prisión domiciliaria es una salida oportuna” para Milagro Sala, que permanece presa hace más de un año. Luego de la cautelar de la CIDH, el funcionario PRO reconoció que debe aplicarse “una prisión domiciliaria o una libertad vigilada”. Avruj aseguró que Sala “nunca fue vista como enemiga, sino como una ciudadana que estaba reclamada por la Justicia para dar respuestas”. No explicó cómo entraban dentro de esa categoría las declaraciones del gobernador jujeño, Gerardo Morales, que se la pasa vociferando que Sala “se robó todo”. “Fuimos nosotros, con el ministro de Justicia y Derechos Humanos, Germán Garavano, quienes entendíamos que la prisión domiciliaria era una salida oportuna. Los organismos denunciaban que era una prisión arbitraria y reclamaban la liberación, pero la CIDH no ha dado respuesta a eso, sino que se ha expedido sobre la situación de detención para determinar que cambie el lugar donde ella está transitando su detención, en vez de estar en al Alto Comedero que esté en su casa, con todas las garantías, los cuidados y los controles correspondientes”, afirmó Avruj. Sin embargo, en rigor, la cautelar de la CIDH respalda el reclamo del Grupo de Trabajo de la ONU que ordenó la “inmediata liberación” de Sala.