Adrián Paenza, columnista de PáginaI12 que reside en Estados Unidos, dijo que el último episodio de violencia racial en ese país no es un hecho aislado. “Hay algo que está latente desde hace mucho tiempo: es un cuerpo muy enfermo que va produciendo algunas manifestaciones”. Paenza recordó en diálogo con Víctor Hugo Morales en AM 750 que en Ferguson un policía blanco mató a un joven negro, un hecho que fue el detonante de protestas de la comunidad afrodescendiente. En el caso de Virginia, durante el fin de semana, “se trató sin eufemismos de un grupo de nazis que se autodenominan así y hacen el saludo nazi, que convocaron a una marcha en favor de la raza blanca. El slogan de este grupo es querer recuperar Estados Unidos para los blancos”, sostuvo el matemático argentino. Y agregó información sociológica para entender por qué un joven atropelló a una multitud de contramanifestantes antirracistas. “La ciudad de Charlottesville queda a unos 200 kilometros al sudoeste de Washington, la capital. Según el último censo de 2015 tiene una población de 46.600 personas, siendo que 21.985 son estudiantes. Ahí está enclavada la Universidad de Virginia, que es la universidad pública más grande de Estados Unidos. El campus parece aislado de todo, es una zona rural, donde hay votantes de Trump. El lugar fue elegido adrede por la derecha y la ultraderecha y contó con la participación del Ku Klux Klan. Ese grupo fue recibido por gente que se manifestaba de forma pacífica en contra de esa marcha. Y sucedió el ataque. El mayor cuestionamiento que se le hace a Trump es que él no critica a los grupos nazis, lamenta la violencia de todas las partes: es como aceptar la teoría de los dos demonios en Argentina. Se estimula la apología de la violencia. Pasó en Charlottesville pero es peligrosísimo en tanto Trump es quien está a cargo del poder ejecutivo en Estados Unidos.”