Una vez más, como cada fin de año, Thierry Frémaux está en Buenos Aires, para presentar la Semana del Festival de Cannes, que comienza hoy en el Espacio Incaa-Gaumont. El director general del festival de cine más influyente del mundo preparó una selección acotada -apenas seis films– pero representativa de la diversidad que signó la edición de mayo pasado, quizás una de las mejores de los últimos años. 
Y Frémaux no viene solo. Hoy llega también Viggo Mortensen, para estar en la proyección de Captain Fantastic, que protagoniza y que le valió el premio a la mejor dirección al estadounidense Matt Ross, en la sección Un Certain Regard. Y mañana aterriza Isabelle Huppert, para dar una charla magistral junto a Frémaux (ver programación aparte) y presentar Elle, del holandés Paul Verhoeven, que fue una de las películas más celebradas y controvertidas del último Cannes, donde volvió a convalidar su inmensa calidad de actriz. 
Antes de prestarse al juego que le propone PáginaI12, que consiste en presentar cada uno de los films de la Semana de Cannes como si estuviera frente al público, Frémaux desliza dos primicias. La primera es que está pensando en la posibilidad, para el año próximo, de ampliar la programación de este petit Cannes en Buenos Aires: “Es que el público de aquí es excelente, está muy informado, tiene una idea muy precisa de Cannes y querríamos traer más películas”. 
La segunda es que está terminando de corregir las pruebas de galera de su libro titulado Sélection officielle, que entregará a imprenta en pocos días más: “Es un diario personal, una suerte de cuaderno de bitácora que da cuenta del trabajo cotidiano de todo un año, desde Cannes 2015 a la edición 2016, una manera de contar cómo hacemos nuestro festival, en todos sus detalles”. Considerando la importancia y repercusión de Cannes en todo el mundo, y que suele guardar los secretos de su selección bajo siete llaves, acceder a la cocina del festival promete una mirada inédita sobre el tema, a cargo de su principal responsable. “La idea es que mi libro forme parte de lo mucho que tendremos para festejar en la próxima edición, en la que Cannes cumplirá 70 años”, cuenta Frémaux. 
¿Habrá cine argentino en mayo 2017, en esa edición aniversario? Con tanta antelación, Frémaux dice que no puede asegurarlo, pero que el cine argentino siempre está entre sus preferidos, como lo prueba el hecho de que en la edición de mayo pasado programara La larga noche de Francisco Sanctis, la película de los debutantes Andrea Testa y Francisco Márquez que le resultó “toda una sorpresa”. Para Frémaux, “descubrir directores es uno de los deberes de Cannes” y señala a su vez que “es importante que el cine argentino siga teniendo el apoyo del Estado, porque el cine es un arte que requiere de muchos recursos y que hay que sostener en el tiempo”. 
Según asegura (y la programación le da la razón) “en estos diez años que he estado a cargo del festival, hay cuatro cinematografías que nunca han dejado de estar en Cannes: Argentina, México, Rumania y Corea. Son de un potencial enorme”. Y hablando de Corea, Frémaux abre el juego justamente con una de las seis películas que trajo de Cannes a Buenos Aires:

  • Train to Busan: “Es la prueba de que el cine coreano se renueva constantemente, que cada año aparecen directores nuevos de talento, como en este caso Yeon Sang-ho. Se trata de un film muy sólido y muy divertido también. Ha sido un gran éxito de público en su país y se ha vendido a todo el mundo. Y por nuestra parte es la manera de afirmar que hay autores dentro del cine de género (especialmente en el cine coreano) y que ese cine también debe estar en Cannes, porque como siempre digo Cannes es la casa del cine, donde todos deben estar representados: el documental, la animación, el cine de autor y también el cine que está dirigido al gran público”.
  • Elle: “Es una comedia social, muy europea, muy francesa, muy negra también, basada en una novela de un escritor francés muy reconocido, Philippe Djian, que a priori puede parecer que no es un film de búsqueda, pero que sin dudas es un film de autor. Su director, Paul Verhoeven, hizo excelentes películas en su país, Holanda, como Turkish Delight, luego se fue a Hollywood para hacer grandes superproducciones, en las que también dejó su huella, y ahora ha vuelto a Europa, a Francia, y le ha confiado un papel muy difícil a Isabelle Huppert, que sigue demostrando que no ha perdido nada de la audacia de su juventud. Fue todo un desafío poner esta película en la competencia oficial y ahora es la representante francesa en el Oscar de Hollywood al mejor film extranjero”.  
  • Captain Fantastic: “Fue un riesgo también programarla en Cannes, en este caso en la sección Un certain regard, porque se trata de un film pequeño, cariñoso, accesible, que mis amigos afectos al cine más radical no siempre supieron valorar, pero que desde su lanzamiento en Cannes ha sabido construir poco a poco un público en todo el mundo, en gran parte gracias al aporte y la personalidad de Viggo Mortensen. Cuando le conté del proyecto inmediatamente quiso venir a presentar conmigo la película a Buenos Aires, a pesar de que tenía una agenda muy cargada. Viggo quiere mucho a este país”.
  • I, Daniel Blake: “Si nunca viste una película de Ken Loach, con ésta se puede empezar, porque es un Ken Loach puro. Y si conocés toda su obra previa, también la vas a apreciar, justamente porque es un Loach en estado puro, con todo su amor por los personajes y toda su rabia contra las injusticias sociales. Y Loach es muy modesto, muy generoso, no quería poner la película en competencia oficial. Me dijo que no, que guardara ese lugar para gente más joven, que él prefería ir fuera de concurso. Pero lo convencimos, y terminó ganando la Palma de Oro, la segunda de su carrera”. 
  • Toni Erdmann: “Fue un milagro, porque provocó algo inédito en la historia de Cannes, que en la función de prensa todos rieran, e incluso que aplaudieran a escena abierta, mucho antes de que la película terminara. Al comienzo no se sabe muy bien si uno va a querer pasar dos horas con el protagonista, pero poco a poco la directora Maren Ade, toda una autora, se va ganando al espectador. Es también el regreso en grande de Alemania a la competencia oficial de Cannes”. 
  • Juste la fin du monde: “Es la película de un director canadiense de 27 años y que ya tiene seis películas como director. Y esta en particular fue un gran desafío para él, porque trabajó sobre una obra teatral de un gran autor francés, Jean-Luc Lagarce, y con un elenco increíble, de grandes estrellas, como Nathalie Baye, Vincent Cassel, Léa Seydoux y Marion Cotillard. Es un film universal, sobre la familia, la soledad, la muerte, el duelo y que le valió el Gran Premio del Jurado.


Para anotar en la agenda

La agenda de la Semana de Cannes en Buenos Aires, que se llevará a cabo a partir de esta noche en el Espacio Incaa-Gaumont, con funciones únicamente a las 20 horas, es la siguiente:
Hoy I, Daniel Blake (Reino Unido), de Ken Loach, ganadora de la Palma de Oro. Mañana, Captain Fantastic (EE.UU.), de Matt Ross, premio a la mejor dirección en la sección Un certain regard, con presentación de su protagonista, Viggo Mortensen, y diálogo posterior con el público. Miércoles 30, Elle (Francia), de Paul Verhoeven, con presentación de su protagonista, Isabelle Huppert. Jueves 1º, Train to Busan (Corea), de Yeon Sang- Ho. Viernes 2, Juste la fin du monde (Francia), de Xavier Dolan, Gran Premio del Jurado. Sábado 3, Toni Erdmann (Alemania), de Maren Ade. Domingo 4, repite I, Daniel Blake, de Ken Loach. Entradas $30 pesos la general y $10 para estudiantes y jubilados. A su vez, el jueves 1º, a las 18 horas, charla magistral de Isabelle Huppert con Thierry Frémaux, con traducción simultánea. Entrada gratuita hasta colmar la capacidad de la sala.