El teléfono celular de Anahí Benítez fue encontrado ayer en poder de un adolescente de la zona que dijo que se lo había dado su padre, quien quedó aprehendido por “encubrimiento agravado”. Los investigadores llegaron hasta la calle José M.Jorge al 400, de la localidad de Llavallol, en Lomas de Zamora, siguiendo la pista del número de Identidad Internacional de Equipo Móvil (IMEI, en inglés), que es un código otorgado a los fabricantes de celulares para hacer el seguimiento o bloquear al aparato. El celular de la adolescente asesinada, un teléfono marca Samsung, modelo Core y de color blanco, fue hallado en poder de un chico de 17 años, que reside allí junto a su madre y fue demorado. El chico dijo que el celular se lo había dado su padre, por lo que buscaron al padre a quien encontraron en su departamento, también en Llavallol,  a unas 18 cuadras de la calle Jorge al 400. El hombre, también demorado, dijo que había hallado el aparato en un baldío cercano –situado a unas 15 cuadras en línea recta de la reserva natural donde fue hallado el cuerpo de Anahí–. Los peritos de la Policía Científica rastrillaron el predio y por la tarde hallaron entre unos pastizales la funda negra y fucsia de dicho aparato. Por otro lado, familiares y amigos de Marcos Bazán, el primer detenido, reclamaron su libertad.