Todo empezó con un titular leído el año pasado en el diario El país, de España: “Francia se apoya en la ciencia ficción para preparar las guerras del futuro". El plan gubernamental de convocar a escritores, guionistas y dibujantes para imaginar posibles amenazas a las que el país pudiese enfrentar en el porvenir llamó inmediatamente la atención de la guionista Marta Betoldi. No para alistarse a esa propuesta, sino para crear una ficción que tuviera ese disparador. Así fue que desarrolló Escribiendo el fin del mundo, un guión pensado inicialmente para el audiovisual pero que terminó encontrando su lugar como audioserie. Un podcast que puede escucharse de manera gratuita en la plataforma internacional Sonora y que cuenta con un elenco completamente integrado por actrices y actores argentinos, con Nancy Dupláa, Fabio Posca y Alan Sabbagh como protagonistas.

Acostumbrados a poner el cuerpo, a pensar la actuación y la escritura en función de una expresividad audiovisual, tanto los actores como los guionistas enfrentan en los podcast ficcionales nuevos desafíos. La transición tecnológica coloca a experimentados artistas del esquema tradicional ante nuevas posibilidades laborales. Escribiendo el fin del mundo, la audioserie de 9 capítulos de 17 minutos cada uno, es un ejemplo de los caminos que abren las nuevas tecnologías para quienes se formaron en teatro, TV y cine. ¿Cómo resulta interpretar personajes y escribir guiones para historias seriadas que solo pueden escucharse?

“Lo complejo para mí en la creación de escribir auditivamente una serie fue que mi cabeza, acostumbrada a lo visual, se centrara solo en lo auditivo. Era imprescindible que todo fuera claro para el oyente”, le cuenta Betoldi (Socias, Ciega a citas) a Página/12. “Al principio me costó bastante salir del formato audiovisual, mi creatividad iba en una dirección ya transitada. No quería sobreexplicar las situaciones pero rápidamente entendí que había que reforzar lo sonoro y poco a poco fui entrenado una nueva manera de escribir”, subraya la guionista.

De largo recorrido televisivo y teatral, Betoldi echa por tierra una confusión que habitualmente sucede a la hora de diseñar este tipo de formatos nuevos: los podcasts de ficción actuales no son radioteatros modernos. “Las audisoseries actuales no son radioteatros ya que tienen una dosis tal de posproducción sonora que ayudan al oyente a cerrar sus ojos e potenciar su imaginación. Esto me resultaba altamente creativo. Lograr crear un mundo desde la palabra y lo sonoro”, confiesa.

A aquel disparador informativo la guionista le dio una vuelta de tuerca, para acentuar el nudo dramático: ¿Qué sería de los guionistas si tuvieran que imaginar y anticipar futuras guerras para los gobiernos? Bajo es premisa desarrolló una comedia, en clave de thriller político, en el que tres guionistas son contratados por una supuesta plataforma de streaming para crear una serie apocalíptica de ciencia ficción. Pero nada es lo que parece: al tiempo descubren que en realidad están trabajando para el Ministerio de Defensa de la Nación, quedando en medio de un fuego cruzado entre los servicios de Inteligencia, el Presidente de la República y un intento de golpe de Estado.

La actriz Nancy Dupláa interpreta a una de las guionistas protagonistas de Escribiendo el fin del mundo. La experiencia de introducirse en un lenguaje novedoso fue, para ella, la posibilidad de dejarse llevar por la parte más lúdica de la actuación. “Desde el minuto uno fue juego puro, porque estás metida dentro de un lugar donde no importa tu cuerpo, tu acción, tu mirada, sino que Io que vale es cómo lo trasmitís desde la voz”, le explica a Página/12. “Es algo que me me gusta desde que era chica, incluso antes de empezar a pensar en el teatro como posibilidad", detalla. "Le ponía voces a los dibujitos que leía, como Mafalda. Después jugaba mucho con las voces con mis hijos y hasta con los perros. Así que fue como entrar en un juego que de alguna manera para mí era muy conocido”.

La actriz que alcanzó popularidad cuando era adolescente en Montaña Rusa, y desde ese momento construyó una extensa carrera televisiva, reconoce que actuar una audioserie fue placentero por varios motivos. “Uno de ellos es que se trata de un trabajo donde estamos menos expuestos. La verdad que el hecho de no tener que maquillarse, peinarse, y estar como en primer plano tu cuerpo, es algo muy cómodo, muy placentero para para hacer”, destaca. “Hay algo que al no verse -agrega en relación al trabajo en el podcast- hay que ser demasiado explícito, más de lo que uno es en un audiovisual, porque las acciones no se ven, por lo que hay que tratar con el cuerpo de llevar esa acción y que se note en cómo uno transmite la voz”.

La protagonista de series como El reino, Socias, Graduados o La leona sostiene que el trabajo previo con Betoldi -que también dirigió la serie- y con los actores fue fundamental. “Tuvimos reuniones previas, un par las hicimos por Zoom y también hicimos lecturas con Marta. No estábamos todos en las lecturas, estábamos los grupos que teníamos más escenas juntos. En mi caso, con Favio Posca y Alan Sabbagh. Nosotros tres grabamos siempre juntos y se iban incorporando otros actores según las escenas, como Ernesto Claudio, Carlos Portaluppi, Eleonora Wexler y Carlos Santamaria”, puntualiza.

Entusiasmada, a la vez que consciente de la reconversión que transita el mundo actoral, Dupláa no duda que los podcasts ficcionales “vinieron para quedarse”. “Es -señala- un entretenimiento nuevo, algo que viene a llenar un espacio que mucha gente necesita, como un espacio de intimidad que tiene el formato. La atención tiene que estar bien concentrada, bien puesta en lo que estás escuchando y a partir de ahí liberar tu creatividad. Como oyente a mí me costó, hasta que pude hacer eso y entré en la convención. Me parece que las audioseries son positivas porque se amplía nuestro trabajo, da más lugares”.

La libertad creativa que permiten, no tener que lidiar con los límites presupuestarios del audiovisual y los plazos más cortos de producción posicionan al formato como un espacio fértil, que tendrá un fuerte desarrollo en los próximos años. y a estas cuestiones de producción habrá que sumarle que se trata de un lenguaje cada vez más demandado: en Argentina ya el 13% de la población consume podcast, un porcentaje que llega al 23% entre el segmento que va de los 18 a los 29 años, según los datos surgidos de la Encuesta de Consumos Culturales que se conoció este año. 

A nivel mundial, ya se observa cómo audioseries son adaptadas al audiovisual, tal los casos de Homecoming (Prime Video) y Dirty John (Bravo/Netflix) en Estados Unidos o de El gran apagón (Movistar Plus) en España. “La recepción y las críticas de Escribiendo… en España fueron excelentes y algunas plataformas y productoras se mostraron interesadas en convertirla en serie audiovisual. Ojalá sea posible”, se entusiasma Betoldi.