Para Gabriel Brener, “la intención es sustituir a los cuadros técnicos del estado por una tercerización con las fundaciones”. “Eso es lo central, lo fundamental de tener en cuenta, porque justamente hay toda una vía de mercantilización educativa que tiene que ver con esto. Tampoco se sientan a trabajar con los gremios.” Licenciado en Educación, ex subsecretario de Gestión del ministerio de Educación durante el mandato de Alberto Sileoni, Brener recordó que “hasta el 2015 la forma que adoptó la formación permanente siempre fue un trabajo de mesa paritaria con los gremios. Casi todo lo desarrolló el Instituto Nacional de Formación Docente (INFD). Fue un trabajo masivo, dirigido al millón 300 mil maestros y profesores. Tan grande, que la subsecretaría de la que me hice cargo tomó la capacitación de algunas áreas: tutores, preceptores, prevención de adicciones, convivencia, violencia... un conjunto de temáticas transversales. A toda capacitación la garantizaba el Estado de manera gratuita y a escala masiva, y esto es lo que hoy está siendo desarmado”. “El macrismo tiene una forma de desguazar al estado que consiste en no cerrar nada, sino achicarlo y vaciarlo. De hecho, el Programa de Nacional de Formación docente no fue cerrado. El vaciamiento es por goteo, manteniendo una oficina pero modificando su función, pulverizando todas las áreas que tienen que ver con la educación obligatoria... A muchos de los cuadros los fueron, otros se fueron, a otros los desparramaron en distintos lugares del ministerio para neutralizarlos.”