El ministro del Interior, Rogelio Frigerio, y la de Seguridad, Patricia Bullrich, recibieron a los gobernadores patagónicos con quienes conversaron sobre la situación del caso de Santiago Maldonado, pero también sobre cómo coordinar en forma más efectiva a la Gendarmería, la Policía Federal y las policías locales para combatir a los grupos de mapuches a los que el Gobierno considera “violentos”. En el encuentro estuvieron los gobernadores de Río Negro, Alberto Weretilneck, y de Neuquén, Omar Gutiérrez, quienes se retiraron sin hacer declaraciones. Al encuentro no concurrió, en cambio, el vicegobernador de Chubut, Mariano Arcioni (en ejercicio de la gobernación por la licencia de Mario Das Neves). En su entorno indicaron que fue convocado a última hora y ya tenía su agenda completa. Sobre la gobernadora de Santa Cruz, Alicia Kirchner, no se informó si fue invitada. Según señalaron fuentes gubernamentales, en el encuentro –que duró 45 minutos– se hizo “un análisis del conflicto mapuche y del accionar en la Patagonia de los grupos más radicalizados, como el RAM”, una organización cuya existencia es agitada por el oficialismo.