Recién hoy la concejala rosarina María Eugenia Schmuck se integrará al equipo de campaña de Luis Contigiani, luego de haber caído ante el ministro en la PASO del Frente Progresista. Sorprendió el fin de semana pasado con su asistencia a una reunión de radicales corralistas en la capital provincial, encabezada por el propio intendente macrista. Rápidamente la contactaron los correligionarios progresistas y se sumará a la campaña previa a las generales del 22 de octubre. Pero ella es muy dura con el momento del partido que gobierna la provincia y advierte: "El Frente, si quiere seguir existiendo, tiene que recrearse, reinventarse, llamarse de otra manera, convocar a otras fuerzas. Así como está, no va más".

Schmuck cosechó unos magros 41 mil votos en la interna del Frente. Contigiani, su vencedor, se clavó en 174 mil sufragios. Entre ambos juntaron menos del 12 por ciento, para quedar bastante lejos del victorioso Frente Justicialista y de Cambiemos. Al no acordar con la conducción del PS, la edila y su compañero de bloque Sebastián Chale hicieron rancho aparte y apostaron a la PASO en concejales y diputados nacionales, pero cayeron derrotados sin atenuantes. La concejala asegura que hubo "cero interés" del socialismo por sumarla a la segunda campaña y en el medio, como quien no quiere la cosa, se reunió con José Corral y su pollo Albor Cantard.

"Fue una reunión bastante informal", observó Cantard al hablar con Rosario/12. "No se abordó ningún tema político, mucho menos de cara al futuro, pero hicimos un análisis de los resultados, particularmente de Cambiemos", amplió. Negó que se haya dialogado con Schmuck sobre un acercamiento suyo al frente nacional, aunque admitió que "siempre" aguarda "sumar no solo del radicalismo, sino de otros sectores, a este proyecto". Destacó, a la vez, que el mitín haya tenido "un clima de mucho entusiasmo" por los resultados de Cambiemos en Santa Fe.

"Fue una convocatoria de Corral, hay que empezar a dar las discusiones adentro. Aunque uno tome otro camino, siempre es bueno poder dar las discusiones adentro. Fuimos los radicales que fuimos parte del Grupo Universidad, no fue una reunión de Cambiemos. Era correcto participar", sintetizó Schmuck, despegándose de los dichos de Cantard, que habló de un encuentro de Cambiemos. En rigor, también asistieron radicales ganadores en Esperanza, Avellaneda, Reconquista y El Trébol (Carlos De Lorenzi, que ganó la PASO dentro del Frente Progresista). La rosarina no fue la única frentista, pero sí la figura más reconocida y llamativa.

Pero lejos de aferrarse al progresismo provincial, la concejala retomó y profundizó sus críticas al socialismo. "No nos hemos ni juntado, está todo muy frío para la campaña, hay que discutir varias cosas", apuntó y dijo que el gobernador Miguel Lifschitz cometió un "error" al nacionalizar las elecciones. "Yo tengo cero especulación, así como está no me siento adentro del Frente, sí para trabajar por otros liderazgos, por otra forma de construir. Hay que construir algo diferente, de fuerzas progresistas, que no tenga a nadie como rival, que sea una alternativa de gobierno", cerró Schmuck.

En la misma línea se encuentra Fabián Palo Oliver, el ex compañero de fórmula de la rosarina en la categoría diputados nacionales. El de Santo Tomé ya se reunió con el socialismo y promete su "mayor esfuerzo para hacer la mejor elección posible" en octubre. Pero avisó que después de las generales "habrá que discutir mucho cuál es el camino a seguir", porque "va a haber una nueva configuración" del Frente Progresista. "Nunca fuimos convocados a dialogar, por eso decidimos presentarnos a elecciones en las PASO. Hoy todo se está hegemonizando entre el socialismo y una expresión del radicalismo (NEO), expulsando a expresiones minoritarias", se quejó Palo Oliver.