Otro ataque sacude a la comunidad cultural marplatense. Ya es el segundo de este mes pero el cuarto en total en los últimos dos, algo que permite hablar de un amedrantamiento organizado a los activistas culturales del municipio de General Pueyrredón. Primero había sido al teatro El Séptimo Fuego y ahora fue el Centro Cultural El Club de Teatro la víctima de un violento asalto anónimo, que ocurrió antes de ayer por la madrugada y mantiene en vilo a la ciudad.

“El hecho sucedió en la madrugada del lunes. Cuando una compañera fue a abrir el teatro al mediodía, se encontró con que habían forzado la reja y roto la puerta de hierro. También habían violentado la boletería y roto la persiana. Lo llamativo es que no se llevaron nada de la sala, solo las computadoras que estaban adelante”, cuenta a PáginaI12 Mónica Pari, una de las cuatro socias que hace doce años trabajan en el Centro Cultural.

Hace veinte días, un episodio similar había ocurrido en el Séptimo Fuego. En ese momento, la comunidad cultural entendió que se trataba de un apriete, porque no habían robado nada. La referente de ese espacio es una de las más visibles caras del reclamo por el vaciamiento cultural en la región, denuncia que un numeroso grupo de artistas lleva a cabo desde la Asamblea en Defensa de la Cultura. Pari y otras referentes del Club de Teatro también integran aquel espacio, por lo cual la comunidad cultural no duda en desestimar que estos sean hechos aislados sino más bien una serie de ataques organizados para dar algún mensaje.

“Pareciera que quieren ponernos piedras en el camino a los que participamos”, dice Pari, en consonancia con el comunicado que publicó el teatro, que reza: “Nos da mucha tristeza saber que no somos el primer centro cultural que sufre un acto vandálico de estas características y esperamos que la comunidad comprenda la desproteccion que sentimos por estos días”.

Los responsables del espacio ubicado en la calle Rivadavia 3422 hicieron la denuncia inmediatamente, aunque al cierre de esta edición los integrantes de la asamblea cultural se encontraban reunidos y no descartaban establecer el mismo sistema de guardias nocturnas de artistas, como sucede desde principios de mes en El Séptimo Fuego. También decidían si hacer un festival en la puerta del teatro, para visibilizar la situación, o si poner todos esos esfuerzos en un gran festival que se va a llevar a cabo el viernes frente a la municipalidad de Mar del Plata. Como sea, los teatristas de la zona están decididos a no bajar los brazos frente a los ataques y seguir haciendo frente al vaciamiento cultural.