“No aceptamos el maltrato del juez Guido Otranto al pueblo mapuche, a la familia Maldonado y a los organismos de derechos humanos, como tampoco aceptamos que exima de responsabilidades, sin fundamento a Gendarmería y a sus superiores jerárquicos del Estado por la desaparición forzada de Santiago Maldonado”. Así se pronunció la Asamblea Permanente por los Derechos Humanos y adhirió a la recusación del juez pedida por la familia y el CELS. “Rechazamos la intemperancia de Otranto hacia la Pu Lof en Resistencia y otras comunidades mapuches-tehuelches de Vuelta del Río durante el allanamiento del 18”, añadió.