Pocos días después de que Donald Trump lanzara su amenaza de “destruir totalmente” a Corea del Norte, bombarderos estadounidenses volaron cerca de la costa este de ese país con el objetivo de enviar un "mensaje claro" a Pyongyang. “Estamos listos para utilizar todas nuestras capacidades militares para defender a Estados Unidos y a nuestros aliados”, indicó el Pentágono.

La misión efectuada por un bombardero B-1B y un caza F-15 ocurre en momentos en que la comunidad internacional teme un nuevo ensayo nuclear por parte de Corea del Norte.

"Fue una demostración de la determinación estadounidense y un mensaje claro de que el presidente dispone de numerosas opciones militares para enfrentar cualquier amenaza", afirmó la portavoz del Pentágono, Dana White.

"Ese fue el sitio más al norte de la zona desmilitarizada al que un avión de combate estadounidense o un bombardero sobrevoló cerca de las costas norcoreanas en el siglo XXI, destacando así hasta qué punto tomamos seriamente el peligroso comportamiento de Corea del Norte", agregó el comunicado del Departamento de Defensa de los Estados Unidos.

La acción que tuvo el visto bueno del titular de la Casa Blanca dejó en claro que ese país "está listo para utilizar todas nuestras capacidades militares para defender a Estados Unidos y a nuestros aliados".

Esta mañana, Ri Yong Ho, canciller de Corea del Norte, subió al estrado de las Naciones Unidas en Nueva York y le contestó a Trump. Dijo que el mandatario estadounidense “cometió un error irreversible” al llamar “hombre mísil” al líder norcoreano Kim Jong-un.

Trump se estrenó el martes en la Asamblea anual, y definió allí a Kim como "un hombre misil en una misión suicida", a lo que Ri respondió que "nadie excepto Trump se encuentra en una misión suicida".

El responsable de las relaciones exteriores de Corea del Norte también apuntó a Washington si la escalada militar continúa. "En el caso de que las vidas inocentes de los estadounidenses sean amenazadas por el ataque suicida de Trump, él será totalmente responsable"”, afirmó.

El magnate republicano había dicho ante el plenario que si Kim continuaba con sus ensayos nucleares, él procedería a “destruir por completo” Corea del Norte. Esas palabras “mancharon este foro” y “provocan la indignidad de Corea del Norte”, respondió hoy el gobierno de Pyongyang a través de su canciller, que usó expresiones como “malvado” y “mentalmente trastornado” para referirse a Trump. Ri no dudó en decir que el multimillonario convirtió la Casa Blanca en “un mercado ruidoso lleno de ruido”.