Los salarios de bolsillo para las categorías intermedias de los convenios colectivos de los gremios de maestranza, seguridad privada y administración pública nacional se ubicaron en octubre por debajo de la línea de pobreza. En el caso de la alimentación el salario es similar al monto necesario para adquirir una canasta básica alimentaria de 13.335 pesos. Desde el Centro de Estudios del Trabajo y el Desarrollo de la Universidad de San Martín advierten que la caída en la pobreza de un segmento de los trabajadores en relación de dependencia es “una de las consecuencias del fuerte deterioro del poder adquisitivo de los ingresos laborales durante 2016”.

Aunque se encuentran entre los más afectados, el impacto de la aceleración inflacionaria sobre el ingreso de bolsillo excede a los trabajadores de planta permanente nivel D en el sector público, los oficiales especializados de maestranza y los vigiladores con tres años de antigüedad. El último boletín del CETyD advierte que la suma de los salarios de convenio, los adicionales habituales y las asignaciones familiares dejó en octubre a un oficial metalúrgico con tres años de antigüedad con un ingreso de 15.564 pesos, apenas un 6 por ciento superior a la canasta básica de la pobreza estimada por las autoridades estadísticas de la Ciudad de Buenos Aires. Los empleados de comercio (la categoría Vendedor C con 3 años de experiencia, asistencia y puntualidad) recibieron en octubre un salario de bolsillo 8 por ciento por encima a la CBA porteña.

En el grupo de 9 convenios analizados por el centro de estudios que dirige el legislador porteño y ex ministro de Trabajo, Carlos Tomada, el salario de categoría intermedia supera como máximo un 18 por ciento el valor de la canasta mínima de bienes y servicios que delimita la situación de pobreza. Desde el organismo que depende de la Unsam estimaron que para recuperar el salario promedio perdido desde diciembre del año pasado los trabajadores comprendidos en esas actividades deberían recibir un monto adicional que va entre 13 y 21 mil pesos. “Para establecer una nueva base de negociación en 2017 sin pérdida del poder adquisitivo debería sumarse al salario básico promedio de diciembre un monto que ronda entre los 800 y 2000 pesos según el convenio y la categoría. Esto dista mucho del bono por única vez de 2000 pesos que se negociará sectorialmente”, consideró el CETyD.