Los resultados del referéndum independentista que celebró ayer Cataluña en un marcado clima de violencia podrían afectar directamente el futuro del argentino Lionel Messi y del resto de los jugadores de fútbol que se desempeñan en el club Barcelona. En caso de que Cataluña se separe del gobierno español de Mariano Rajoy, las estrellas podrían ser excluidas de la Liga porque los catalanes dejarían de ser parte del territorio español.

Otras ligas, como la Premier League británica, la Serie A de Italia o la Liga Francesa podrían acoger al multicampeón equipo. 

Barcelona no sería el único club catalán que tendrá que decidir dónde seguir jugando, porque Espanyol y Girona también deberán seleccionar un país vecino para continuar su actividad. El presidente del Director General de Deportes de la Generalidad de Cataluña, Gerard Figueras, insistió en más de una oportunidad en que los clubes de élite podrían terminar en Inglaterra, Francia o Italia. “Mónaco juega en Francia y en Inglaterra hay clubes escoceses”, ejemplificó Figueras y vaticinó: “No creo que la UEFA tenga algo en contra de que los clubes jueguen en ligas de otros países”. 

En tanto, José Ramon Lete, el presidente del Consejo Superior Español de Deportes, negó días antes de la votación expedirse sobre el tema, al ampararse en que “no creían que un escenario independentista pudiera ser viable”. “Lo que sí puedo decir es que no entiendo al deporte español sin los jugadores o los clubes catalanes”, expresó. 

El Barcelona, particularmente, además de ser uno de los clubes más conocidos y ganadores de la liga española junto al Real Madrid, se caracteriza porque sus simpatizantes e incluso muchos de sus jugadores y figuras relevantes del club se manifestaron en muchas oportunidades a favor de la independencia catalana. 

Ayer, en medio de las acciones represivas de la Guardia Civil y la policía española para evitar que los catalanes pudieran emitir su voto, las autoridades del Barcelona amenazaron con suspender el partido contra Las Palmas. A pesar de que finalmente se jugó, aunque a puertas cerradas, condenaron en un duro comunicado  "las acciones llevadas a cabo en muchas localidades de toda Cataluña para impedir el ejercicio del derecho democrático y la libre expresión de sus ciudadanos".

La situación de tensión con respecto al partido en el Camp nou se dio cuando Las Palmas comunicó a través de su página web que usaría una camiseta con la bandera española bordada. Así, buscaba expresar su defensa de "la unidad de España".

Al finalizar el partido, Gerard Piqué, uno de los futbolistas emblemáticos, lloró al hablar sobre la represión policial e incluso puso su renuncia a la selección española a disposición de los dirigentes. "Ha sido mi peor experiencia como profesional. Ha sido un día muy duro, familias y niños han intentado ir a votar y la policía… en fin las imágenes hablan por sí solas", aseguró Piqué. 

Además, desde Qatar, Xavi Hernádez se mostró indignado con los hechos de violencia sucedidos este domingo a través de un video. “Lo que está sucediendo es una vergüenza. Es inadmisible que en un país democrático la gente no pueda votar”, expresó en catalán.