Aunque el partido sufrió toda la noche de un mal arbitraje de Andrés Merlos, Newell’s acusó anoche de otro encuentro sin poder ofensivo, con serias limitaciones para llegar al gol. En el primer tiempo estuvo más cerca que en el complemento, aunque Leal las hizo todas mal en la definición. El rojinegro jugó con diez la última media hora ante Godoy Cruz y con inferioridad numérica no dudó el equipo de Juan Manuel Llop en conformarse con el punto. La figura fue Nery Leyes pero Bruno Bianchi se mostró con firmeza en el fondo, entre lo poco que se puede rescatar de un conjunto que suma solo cinco puntos en las primeras cinco fechas de la Superliga.

Newell’s salió a jugar con entusiasmo, encontró algunos buenos momentos de fútbol y se ilusionó con Leal en su apuesta ofensiva. Pero en defensa el equipo estuvo distraído y luego de sus insinuaciones de ataque el juego se equilibró. Lepra se impuso en el medio con Rivero en buena sintonía con Leyes, y San Román aportó sorpresa en sus corridas.

 El partido se jugaba en campo de Godoy Cruz y aparecieron algunas chances para el rojinegro. Primero con una jugada de gambetas cortas de Torres que terminó con zurdazo al cuerpo del arquero, después con cabezazo desviado de Bianchi y Leal perdió una ocasión de gol por demorar en la definición.

  El equipo de Llop parecía estar a la tarea del gol, cuando la visita avisó que tenía ambiciones y el partido volvió a disputarse en el mediocampo. Es que García lo perdió mano a mano con Pocrnjic, molestado por el cierre a tiempo de Paz, y Garro lo dilapidó solo con remate alto. Newell’s contestó con Leal, quien estuvo frente a Burián y remató al cuerpo del uno, y Bianchi ganó por arriba un tiro de esquina pero cabeceó a las manos del arquero.

  En opciones de gol, el partido fue parejo. Pero Newell’s era algo más que el rival en su nivel de juego. Quizá faltó más participación de Cabrera en ataque y aciertos de Figueroa con la pelota.

  Leal nunca de desanimó a pesar de sus fallidas intervenciones. Guevgeozián empezó a hacer ejercicios a un costado de la cancha para pedir por su ingreso y el portugués se esforzó por encontrar el gol que lo deje en cancha. Lo buscó con un remate a las manos del arquero al pisar el área mayor, en la primera acción ofensiva del complemento.

  El deseo de Newell’s por ganar lo llevó a jugar con más hombres en campo rival y San Román pasó a desenvolverle de volante con sus proyecciones. El defensor llegó a posición de gol pero Burián despejó y en el rebote falló Leyes. Lo que cambió el partido fue la roja que vio Rivero al cuarto de hora, por doble amonestación. Merlos echó a Rivero por sancionar una mano que no fue y Llop sacó a Leal.

  Cuando Newell’s se quedó con diez, el partido terminó con las ambiciones de los rojinegros. El equipo no volvió a generar peligro, ni siquiera encontró alguna solución con las variantes. El chico Cabrera jugó escondido, quizá aturdido por el debut, y nadie asumió la conducción del ataque. Las intenciones en el rojinegro se fueron junto al cansancio por el desgaste físico y sumó un punto porque en la última Correa la tiró afuera al aparecer por derecha. Los rojinegros no tienen gol y por eso el empate fue un buen resultado.