A partir de hoy empezarán a declarar ante el juez Claudio Bonadio los diputados y senadores que fueron autoridades de las respectivas cámaras o de los bloques o de las distintas comisiones en las que se trató el Memorándum de Entendimiento con Irán. La jugada del magistrado es hacerles saber a los diputados y senadores que no irá contra ellos, ya que los llama como testigos, no como imputados. En verdad, el Memorándum fue aprobado por el Congreso de manera que si ese tratado fue un delito, los diputados y senadores deberían ser imputados, incluyendo a los que votaron en contra y no denunciaron el delito. Los dirigentes de la AMIA y la DAIA y los dos familiares de las víctimas del atentado que responden a ellos, querían que también se acusara a los legisladores. Como es obvio, Bonadio apunta al gobierno anterior y no quiere aparecer persiguiendo a los integrantes del Congreso. En función de esa estrategia de convocarlos como testigos, citó para hoy a Agustín Rossi, Federico Pinedo y a Ricardo Gil Lavedra. Los dos primeros declararán por escrito. Gil Lavedra es, teóricamente, el único que concurrirá en forma personal. De aquí al viernes, deberían declarar el resto de los 12 legisladores citados, aunque la mayoría lo hará por escrito.