El productor Bob Weinstein, hermano de Harvey Weinstein y cofundador de Miramax y The Weinstein Company, fue acusado ayer por Amanda Segel, productora ejecutiva que aseguró que la acosó sexualmente, informó el medio especializado Variety.

Segel, que trabajó en la serie The Mist (La niebla), que produjo The Weinstein Company, señaló que Bob le hizo propuestas románticas en repetidas ocasiones y la invitó a cenas privadas. “‘No’ debería ser suficiente”, afirmó Segel.

Según su relato, el acoso comenzó en el verano de 2016 y se extendió durante unos tres meses hasta que su abogado aseguró a la cúpula de The Weinsten Company que, si Bob Weinstein continuaba con sus propuestas de carácter personal, ella abandonaría la serie.

Un portavoz de Bob Weinstein negó estas acusaciones: “Bob Weinstein cenó con Segel en Los Ángeles en junio de 2016. Él niega cualquier afirmación de comportamiento inapropiado en la cena o después. Es lamentable que se haya hecho una afirmación así”.

Segel declaró que Weinstein la invitó a su habitación tras esa primera cena, pero ella rechazó la oferta. Luego, el productor le envió correos que iban más allá de cuestiones profesionales, la invitó a fiestas y le propuso de nuevo cenar en varias ocasiones, bromeando con que podría despedirla si no accedía porque era su jefe.

Esta denuncia llega en medio del enorme escándalo que rodea al hermano mayor de Bob, Harvey Weinstein, uno de los productores más poderosos de Hollywood y al que decenas de mujeres han acusado de comportamientos sexuales abusivos y violaciones. La semana pasada Bob declaró a la prensa que él también sufrió agresiones de parte de su hermano, al que describió como “un abusador arrogante, que trataba desdeñosamente a los demás”. “Estoy inmerso en una pesadilla. Mi hermano ha causado un sufrimiento inconcebible. Como padre de tres niñas, digo esto de verdad, tengo el corazón destrozado por las mujeres a las que ha hecho daño”, afirmó el menor de los Weinstein.

Por otra parte,Lena Headey se sumó a la lista de víctimas de Harvey Weinstein. La actriz de Juego de tronos compartió su experiencia en redes sociales: “Conocí a Harvey Weinstein en el festival de cine de Venecia”. La actriz fue a dar un paseo con Weinstein cuando se le insinuó: “Me paró e hizo algunos comentarios y gestos sugerentes. Empecé a reírme, estaba en shock. Le dije algo como: ‘¡Sería como besar a mi padre! Vamos, volvamos con el resto’. Nunca volví a participar en una película de Miramax”.

Años más tarde, Headey coincidió con Weinstein en Los Ángeles: “Siempre había pensado que nunca volvería a intentarlo conmigo. Creía que él respetaría mis límites”. Pero tras desayunar juntos, el director la invitó a su habitación: “Me dijo: ‘Vamos a mi cuarto, quiero darte un guión’. Fuimos al ascensor y la energía cambió. Todo mi cuerpo se puso en alerta máxima. El ascensor subía y le dije: ‘No estoy interesada en nada que no sea trabajo, por favor no pienses que estoy aquí contigo por otra razón, no va a pasar nada’. No sé qué me impulsó en ese momento para hablar así, sólo que tenía un gran sentido de ‘no te acerques a mí’”. “Se quedó callado después de que le dijera eso, furioso. Salimos del ascensor. Su mano estaba en mi espalda, me llevaba hacia adelante, sin decir una palabra. Me sentí completamente indefensa.”

En este contexto, la actriz estadounidense Alyssa Milano sugirió en Twitter que las víctimas de agresión sexual hicieran constar que lo eran para concienciar sobre esta lacra. “Si fuiste acosada o abusada sexualmente, escribe ‘yo también’ como respuesta”, escribió Milano, con un mensaje en el que indicaba que a través de estas dos palabras se podría dar cuenta de la “magnitud del problema”. Tan solo 24 horas después, el mensaje de la actriz tiene casi 50.000 réplicas, la etiqueta MeToo fue tuiteada casi 500.000 veces y otras partes del mundo se han hecho eco.

Tampoco Woody Allen se mantuvo al margen. El director aseguró a la BBC: “Todo el asunto Harvey Weinstein es muy triste para todo el que esté involucrado”, dijo. “Trágico para las pobres mujeres involucradas, y triste para Harvey, cuya vida está hecha un lío. No hay ganadores en esto, es solo triste y trágico para esas pobres mujeres”, insistió.

Allen fue acusado en los 90 de haber abusado sexualmente de su hija Dylan Farrow, acusación que él siempre negó.