River salió a jugar ante Independiente Rivadavia con la necesidad imperiosa de poder lograr la victoria, algo que se le venía postergando desde hacía cuatro encuentros. Por ese motivo, se fue encima de los mendocinos desde el comienzo, y se volcó de inmediato hacia el área de Gonzalo Marinelli.

El equipo construyó tres jugadas de riesgo en los primeros 15 minutos, y en una de ellas Colidio cabeceó y la pelota dio en la base del palo. El asedio fue permanente, y el conjunto visitante se refugiaba en su área para tratar de soportar el vendaval que le proponía el plantel de Demichelis.

La búsqueda fue incesante y el colombiano Borja fue el que finalmente convirtió el gol de cabeza, a los 21 minutos, luego de un envío preciso de Echeverri. El goleador volvió a tener otra oportunidad, pero esta vez la pelota se estrelló en el travesaño, cuando Marinelli se encontraba caído y sin chances de reaccionar.

Borja volvió a mostrar un gran nivel dentro del área, y marcó el segundo gol con un remate de media vuelta. La pelota se introdujo en el arco luego de rozar en Gil Romero, lo que terminó descolocando al arquero.

Independiente presentó el debut del entrenador Martín Cicotello, pero el estreno no fue el mejor. Los mendocinos no mostraron ninguna innovación táctica, y sólo se dedicaron a defender la apuesta ofensiva que exhibió River. Lo que pudieron hacer los visitantes fue muy poco, debido a que su adversario no permitió que pudiera tener el control de las acciones en ningún momento. 

Los cambios que introdujeron los visitantes en el segundo tiempo le dieron al menos más presencia en el mediocampo, y eso provocó que pudieran estar un poco más cerca de Armani. El arquero de River apareció muy bien ante Reali, quien pudo haber descontado, pero él no se lo permitió.

La victoria le transmite tranquilidad a River, que el sábado afrontará un compromiso de riesgo ante el otro Independiente, el de Avellaneda, que también ocupa uno de los puestos de privilegio de esta zona.