La vida artística de Ezequiel Rocha está cruzada por disímiles haceres. Es inquieta, ecléctica. Cantó y actuó en varios musicales, entre El jorobado de Notre Dame según Pepe Cibrián y Todo corazón, de Peter Macfarlane. Es el cantor de jazz del film El sueño de los héroes, de Sergio Renán. Ilustró y dibujó. Y también produjo. Por ejemplo, Musicargentina, trabajo de corte vernáculo que presagió el presente. Y el presente es que acaba de publicar su sexto disco solista, llamado Gracias a Mercedes… nos ha dado tanto, que este multiartista argentino radicado en Perú presentará el 25 de abril a las 20.30 en el Teatro BAC (Suipacha 1333). 

“Grabar un disco homenaje a Mercedes Sosa era una asignatura pendiente para mí”, señala E-zequiel, como le dicen en el medio. “Desde muy chico admiré su interpretación, su cancionero sobre grandes compositores de nuestro país a cuyas letras les puso su impronta y maravillosa voz. Siempre que la escuchaba en sus discos o la veía en sus conciertos salía muy conmovido”.

El proyecto de evocar a la Negra nació en junio de 2023, cuando Rocha llevó a cabo un concierto bajo el nombre de Tonadas para Mercedes, acompañado por Lucho González, arreglador y guitarrista histórico de la tucumana. Y se concretó cuando ambos notaron que daba para más. “Lucho marcó el rumbo y la calidad de los arreglos al estilo personal, pero sin perder la esencia, el gusto y la impronta que Mercedes daba a cada una de sus interpretaciones”, describe Rocha, que completó elenco con el percusionista Martín González Puig y Mariano Delgado en segunda guitarra. “Nuestro espectáculo con Lucho consta de 16 canciones, pero teníamos que elegir solamente ocho para el álbum. Y entre ellas no podían faltar 'Gracias a la vida', 'Todo cambia', 'Déjame que me vaya' y 'Razón de vivir'”.

E-zequiel trabó contacto con González en Lima, donde vive desde 2014. Y admite que le debe al guitarrista peruano la incorporación de conceptos, ritmos y maneras de enfocar las canciones de una forma única. “Con Lucho trabajamos minuciosamente cada canción, cada tonalidad, cada expresión, cada cadencia. Me fue moldeando para sacar lo mejor de mí como intérprete”, dice el intérprete argento-peruano que reconoce en 'Todo cambia', gema del poeta chileno Julio Numhauser mundializada por Mercedes, la versión más emotiva del trabajo. “Es una canción muy movilizadora para mí, al vivir en otro país. Indudablemente, cuando nos pasa esto nos enfrentamos a cambios rápidos, de costumbres, de arraigo y a la vez necesarios para una pronta adaptabilidad y supervivencia. Como dice la poesía, 'no cambia mi amor por más lejos que me encuentre, ni el recuerdo, ni el dolor de mi pueblo y de mi gente'."

Rocha tomó la decisión de migrar al Perú porque en uno de sus viajes cantó como invitado en un concierto de Edu Arauco, uno de los músicos contemporáneos más importantes de ese país, quien le propuso cantar “un par de tangos”. “De ahí en más se fueron dando las cosas de forma inesperada, ya que empezaron a surgir propuestas de presentarnos en lugares tradicionales limeños como Jazz Zone, La Vida Misma o Cocodrilo Verde, donde me fui conectando con reconocidos cantautores peruanos como Lalo Salazar. Y entonces me quedé”.

Rocha vive en el barrio “sereno y amigable” de San Miguel, ubicado a escasos pasos del Pacífico, donde se inspiró también para trabajar Con alma de Chabuca, su disco anterior, en homenaje a Chabuca Granda. “Este disco fue un antes y un después en mi carrera”, sincera. “Implicó un período de mucho crecimiento musical, ya que Chabuca siempre tuvo una amplia variedad de temas en su poesía y en su lírica, que fue innovando y fusionando a través del vals, la marinera, el landó, y todas la riqueza de lo afroperuano”, indica.

Entre Mercedes y Chabuca anda el artista, pues, amparado en un contexto cultural actual diferente al de Argentina. “Si bien en el Perú hay corrupción política, desigualdad social y una fuerte inseguridad, también es cierto que cada vez existe más espacio para la cultura, gracias al apoyo del Ministerio que va en crecimiento. En marzo, sin ir más lejos, fueron lanzados estímulos económicos para financiar proyectos artísticos durante el año, algo que lamentablemente no está pasando en la Argentina, donde se está viviendo un momento de mucha incertidumbre y desesperación en todos los aspectos… el económico, el social, y por supuesto el cultural”.