La postura de Cambiemos de convocar durante el año a sesiones extraordinarias acotando el debate legislativo en la Cámara baja a la agenda del Gobierno, volvió a desatar reclamos en el recinto. Aunque el oficialismo se refugió en el recurso reglamentario de la necesidad de contar con el voto de dos tercios de los presentes para tratar otros temas y logró bloquear que se trate antes de fin de año las acusaciones contra el ministro de Energía, Juan José Aranguren, en la comisión de Juicio Político, así como un proyecto para eximir de impuestos a la producción de vinos que afecta incluso a provincias gobernadas por Cambiemos.

La diputada Araceli Ferreyra (Movimiento Evita) reclamó que antes de fin de año, la comisión de Juicio Político aborde las dos acusaciones que pesan sobre Aranguren. Una de agosto de 2016 con varias causales: “el tema de las audiencias públicas, el cuadro tarifario también irregularmente confeccionado, y esta operatoria de la Shell vendiéndole combustible vía Chile, con participación del propio Ministerio de Energía”, explicó. La otra es sobre la revelación de Paradise Papers, su empresa offshore en Bahamas y sus negocios con el Estado. “No hacerlo va a terminar de alguna manera convirtiéndonos en cómplices de uno de los megaescándalos de corrupción que padecen los argentinos”, sentenció. La votación nominal arrojó 85 votos afirmativos, pero los 82 votos negativos del oficialismo evitaron que se alcanzaron los dos tercios necesarios.  

“Hemos visto con muchísima preocupación que desde el Poder Ejecutivo se haya estado impulsando el establecimiento de un impuesto interno a los vinos tranquilos del 10 por ciento y del 17 a los espumantes”, señaló el mendocino Guillermo Carmona, que firmo junto a sus compañeros de bancada del FpV-PJ, Alejandro Abraham, José Luis Gioja y Néstor Tomassi para adelantarse a postura del Gobierno por gravar la producción vitivinícola. “Están en riesgo más 15 mil productores vitivinícolas y más de cien mil trabajadores que están vinculados con esta actividad”, continuó Carmona. 

El radical mendocino Luis Borsani admitió su preocupación por el gravamen y remarcó que “es nuestra opinión que el vino siga teniendo tasa cero”.