Desde Santa Fe.

Tres diputados del Frente Justicialista entrevistaron ayer al fiscal general Ricardo Baclini y al fiscal regional de Santa Fe Carlos Arietti para saber por qué habían desplazado al fiscal Roberto Apullán de las investigaciones al ministro de Seguridad Maximiliano Pullaro y al intendente José Corral, pero las respuestas de los jefes del Ministerio Público de la Acusación no conformaron a los legisladores. El presidente del bloque, Héctor Cavallero, fue enfático al afirmar que no les creía. Y reveló que el fiscal que investigaba ahora es el investigado. "Nos quedamos sorprendidos porque nos dijeron que Apullán ya tiene cuatro causas: una denuncia de Arietti, otra de Pullaro, otra de Corral y la cuarta de un abogado que no recuerdo el nombre".

Cavallero y sus colegas Silvia Simoncini y Roberto Mirabella se reunieron casi dos horas con Baclini y Arietti, en una audiencia que solicitaron los legisladores. El objetivo era pedirles informes por el desplazamiento de Apullán -llevaron las preguntas por escrito‑ y luego solicitar la "comparecencia" de Pullaro en la Cámara, si es que concurre porque está citado desde hace dos meses. "La idea es escuchar las dos versiones y luego sacar una conclusión. Porque lo que ocurrió es de gravedad institucional", dijo Cavallero.

El cuestionario a Baclini y Arietti apuntaba a reconstruir los hechos. "Los fiscales nos dijeron que el que tenía el teléfono intervenido era el ex jefe de la Unidad Regional V de Rafaela, Adrián Rodríguez" en una investigación de Apullán por las "horas Ospe". Y ahí quedaron grabadas ocho llamadas de Pullaro, entre el 22 de junio y el 10 de setiembre.

El fiscal Apullán investigaba al ministro de Seguridad porque -en esas escuchas‑ alentó a Rodríguez a participar en el concurso de ascenso al máximo cargo de la Policía ‑director general que cobra un sueldo de 100 mil pesos‑, le anunció que él era el presidente del jurado, bromeó con que "le iba a pasar las preguntas como en la escuela", se interesó en saber el "tema de su trabajo" y hasta le pidió el alias con el que había firmado la prueba, que debía ser anónima. "¿Cuál era tu seudónimo? ¿Simón?", le preguntó Pullaro. "No. 'El Sauco'", respondió Rodríguez y le aclaró que era por el campo de su padre.

Cavallero dijo que le preguntaron a Baclini y a Arietti porqué suspendieron las audiencias imputativas a Rodríguez (en las que Apullán iba a acusar al ministro y pedirle el juicio político) y por qué apartaron al fiscal de la causa. "Recibimos una explicación que no nos satisfizo. Y se lo dije en forma enfática: ni a mí, ni a nadie le pueden explicar que Apullán y su adjunta María Laura Martí no fueron apartados de tres causas sensibles: el allanamiento de la Municipalidad de Santa Fe, la investigación a Pullaro y las horas Ospe", relató el legislador.

Baclini y Arietti insistieron que en la investigación a Rodríguez "no había motivos para detenerlo" -como ocurrió el 9 de octubre‑ y que en los diálogos de éste con Pullaro no había delitos.

-‑¿El fiscal superior (Arietti) puede dirigir la investigación de un fiscal inferior (Apullán)? -le preguntó un colega de Aire de Santa Fe.

-‑Ellos dicen que sí -contestó Cavallero. "Nosotros quedamos sorprendidos porque ahora el investigado es Apullán, que ya tiene cuatro causas: una denuncia de Arietti, otra de Pullaro, otra de Corral y la cuarta de un abogado". Y lo va a investigar la auditora del MPA (la ex funcionaria socialista María Cecilia) Vranicich y del sumario podrían surgir sanciones. Yo relato lo que ocurrió, que cada uno saque sus propias conclusiones", sugirió Cavallero.