Banfield y Temperley, que tuvo el debut de Gastón Esmerado como nuevo entrenador, igualaron sin goles ayer en un partido correspondiente a la novena fecha de la Superliga. El empate conseguido en el Florencio Sola, puso fin a la racha de cuatro derrotas consecutivas que arrastraba el Gasolero –marcando un solo gol y recibiendo 11– y que derivó en la renuncia del anterior director técnico, Gustavo Alvarez. Sin embargo, los ahora liderados por Esmerado continúan en la anteúltima posición del torneo, con chances de ubicarse últimos si Rosario Central vence hoy a Talleres en Córdoba. Mientras tanto, el Taladro alcanzó las 15 unidades y perdió la chance de subirse momentáneamente al lote de escoltas, a la vez que todavía sufre por la ausencia por lesión de Darío Cvitanich.

En lo relativo a lo ocurrido en el campo de juego, las intenciones de ambos equipos le dieron forma a un entretenido primer tiempo, en el que Banfield ejerció un leve predominio por su buena circulación de pelota y la peligrosidad que llevó al área rival a través de centros cruzados. Sin embargo, las mejores ocasiones del local, a cargo de Michael López y Pablo Mouche, chocaron con la excelente actuación del arquero gasolero, Josué Ayala –en especial cuando despejó a puro reflejo un remate a quemarropa de Mouche–. Para colmo de males, al final de la primera etapa, el equipo de Julio Falcioni se quedó sin Jesús Dátolo, que se retiró lesionado.

Lo más peligroso de Temperley, que centró su estrategia en la presión en el medio y la verticalidad en el contragolpe, llegó a través de Ramiro Costa, pero su cabezazo fue rechazado por el travesaño.

En la próxima jornada, Banfield volverá a ser local, esta vez ante Defensa y Justicia; y Temperley recibirá a San Martín de San Juan.