El Centro de Estudiantes de la Escuela Técnica 5 de Lomas de Zamora denunció a través de un comunicado que el jueves pasado tuvo lugar un episodio de violencia institucional por parte de la Policía Bonaerense y la local contra un chico de 14 años, alumno de segundo año de ese colegio. El joven, que se encontraba junto a otros compañeros en los alrededores de la escuela esperando para entrar a la clase de Educación física, fue golpeado, esposado, demorado más de dos horas en la comisaría y amenazado para “que confiese” por los uniformados, y terminó con una causa abierta por desacato a la autoridad.

El 16 de noviembre algunos estudiantes de la Técnica 5 se encontraban en la plaza San Martín de Turdera esperando para entrar a la clase de Educación física cuando una mujer dirigió una queja a la policía porque uno de los chicos pasó cerca de ella con su bicicleta. Pocos minutos después llegaron al lugar efectivos de las policía local y Bonaerense, quienes se dirigieron directamente hacia dos de los chicos que estaban en la plaza. Como primera reacción los chicos intentaron escapar. A uno de ellos, que trató de alejarse en bicicleta, uno de los uniformados lo golpeó con la puerta del patrullero. Este cayó de la bicicleta y, una vez en el piso, los agentes procedieron a golpearle la cabeza. El segundo corrió hacia donde se encontraba el resto de sus compañeros y, minutos después, como quedó registrado en un vídeo, fue empujado contra un árbol, amenazado y esposado.

“Lo golpearon, le doblaron los brazos por la fuerza sosteniéndole también las piernas. Lo inmovilizaron poniéndole la rodilla en la cara como si fuese un delincuente. El chico tiene 14 años, estaba asustando e intentaba escaparse, gritaba que lo suelten, que le fueran a preguntar a la señora si le había hecho algo, y cuanto más intentaba explicar que no había hecho nada más lo golpean sin que los demás pudieran hacer nada más que filmar con un celular”, expresó en diálogo con Página12 Sharif Martínez, presidente del Centro de Estudiantes. “Se lo llevaron hacia el patrullero de la Bonaerense, gritándole que no se resistiera. Entonces, llegó una maestra diciendo que era un alumno del colegio, que es menor, que no se lo podían llevar. Pero no la escucharon, ni siquiera la dejaron subir al vehículo con él”, agregó.

La maestra terminó yendo por sus propios medios al Destacamento de Turdera. Ahí tuvieron detenido y esposado al menor durante dos horas. “Nos contó que estando ahí los policías le pedían ‘que confiese’ y lo amenazaban con que nos conocían a todos, con que lo iban a hacer echar del colegio y que no iba a poder entrar a ninguna otra escuela nunca más”, dijo Sharif.

Poco después, la filial de Lomas de Zamora de SUTEBA (Sindicato Unificado de Trabajadores de la Educación de Buenos Aires) dio a conocer su repudio de “este nuevo episodio de abuso policial”. Y también exigieron “respuestas urgentes de las autoridades educativas provinciales, regionales y distritales, así como también acompañaremos a los jóvenes y a sus familias a realizar las denuncias pertinentes”.

No es la primera vez que en esa zona la policía detiene violentamente a jóvenes sin motivo. En mayo de este año la policía local ingresó sin autorización en plenas elecciones en la Universidad de Lomas de Zamora, violando la autonomía universitaria. Por esos días las fuerzas de seguridad intentaron llevarse detenidos a dos estudiantes menores que se encontraban dentro de la Escuela Normal Antonio Mentruyt (ENAM) de Banfield.

“No son hechos aislados. Ya son varios los alumnos de esta escuela que denuncian haber sido hostigados por la policía que merodea la zona”, aseguró Sharif Martínez, quien concluyó que lo que estas escenas dejan a la vista es que “los pibes lamentablemente volvemos a ser foco de la persecución. Esto viene de la mano de un proyecto de país, que es el que quiere el Gobierno, donde la juventud se quede en su casa. Vivimos un clima de persecución y miedo que genera que las fuerzas de seguridad se sientan habilitadas a la violencia incluso, como en este caso, contra menores de edad”.