Un hombre de 32 años fue detenido como sospechoso de haber arrojado del tren y herir de gravedad a la estudiante Brenda Bigiatti, en la estación de la localidad bonaerense de Don Torcuato para robarle el teléfono celular. Luego de 18 días en terapia intensiva, la joven de 26 años, que continúa internada desde el 3 de noviembre, día en que ocurrió el hecho, ayer despertó del coma y se recupera en una habitación común.

Según confirmaron fuentes policiales, el detenido contaba con dos condenas previas por robos de celulares a mujeres, en casos similares al de Brenda, sobre el ferrocarril Belgrano Norte. El arresto fue realizado en las últimas horas por efectivos de la comisaría tercera de Tigre y la Delegación Departamental de Investigaciones (DDI) del mismo distrito, quienes realizaron dos allanamientos en la localidad de José C. Paz y en el Barrio Frino.

En los procedimientos se incautaron ocho celulares y ropa que coincide con las registradas por las cámaras de seguridad de la estación: una campera azul con cuello rojo, un jean y zapatillas azules.

El viernes 3 de noviembre, Brenda viajaba en el tren Belgrano Norte en dirección a Retiro, hacia la Facultad de Medicina, donde cursa el cuarto año de la carrera. A las 17:40, cuando el tren pasaba por la estación Don Torcuato, un hombre le arrancó el celular y bajó corriendo del vagón con el tren en movimiento. El movimiento brusco hizo que la joven perdiera la estabilidad y cayera del vagón detrás el sujeto.

La joven de 26 años fue trasladada al hospital de General Pacheco, donde la indujeron al coma y luego trasladada hasta el hospital El Cruce de Florencio Varela. Este miércoles, tras 18 días en terapia intensiva Brenda despertó del coma. "Hoy puedo decir con una sonrisa que mi hija está bien, pasó el momento crítico", afirmó Elizabeth Buitrón, su madre.

"Abrió los ojos, me miró y sentí que me reconoció. A partir de ahí, la evolución fue cuestión de minutos, los médicos se sorprendieron. Le sacaron el tubo y respiró sola, la pasaron a sala y a la tarde estaba comiendo. Es algo grandioso, me siento la mujer más dichosa del mundo", celebró la madre, que compartió la noticia en su Facebook. Elizabeth detalló también que su hija ya le pidió libros. "Está volviendo a la normalidad, ama la lectura", aseguró.