Isabella, la chica trans de 31 años que padecía una obesidad mórbida que la había llevado a pesar 490 kilos, falleció en el Hospital Provincial, donde había sido trasladada hace unos días en el marco de un inédito operativo. Por su patología, Isabella no podía caminar desde hacía tres años. En agosto, su peso era de 480 kilos y desde abril estaba conectada a un respirador artificial porque sus pulmones habían perdido mucha capacidad. El 16 de noviembre, la joven había sido trasladada desde su casa en el barrio Municipal, en la zona sur, donde se encontraba con internación domiciliaria, hasta el Hospital Provincial, donde falleció ayer. Por la evolución de su enfermedad, crónica e irreversible, el traslado hasta el centro de salud no fue tan sencillo. Para llevarla, Defensa Civil debió derribar una de las paredes de su dormitorio porque era imposible sacarla por la puerta.