El Tribunal Oral Federal 1 de La Plata condenó a prisión perpetua a Carlos "Indio" Castillo por delitos de lesa humanidad cometidos por la Concentración Nacional Universitaria (CNU), pero absolvió a Juan José "Pipi" Pomares, el otro acusado, lo que despertó el rechazo de las víctimas, familiares y organismos de derechos humanos. "Claramente, hay un mensaje de desprotección del Poder Judicial de La Plata, justo en una causa que fue accidentada por el temor que generaba en los testigos tener que declarar", advirtió la abogada querellante de Justicia YA, Guadalupe Godoy.
Castillo y Pomares fueron juzgados desde mayo último por siete secuestros y cuatro homicidios cometidos en La Plata como parte de la organización paraestatal de ultraderecha, que operó antes y después del golpe del 24 de marzo de 1976.
Los magistrados Pablo Vega, Germán Castelli y Alejandro Esmoris consideraron, por unanimidad, que "los hechos juzgados son constitutivos de lesa humanidad e imprescriptibles”, pero no dieron por probada la acusación contra Pomares, para quien ordenaron "la inmediata libertad". “El marco probatorio era más que suficiente para condenar a ambos” y anticipó que apelarán la absolución.
Tras hacer lugar a nulidades de reconocimientos fotográficos realizados por las víctimas, pedidas por las defensas de los imputados, el TOF 1 condenó a Castillo a prisión perpetua por la privación ilegítima agravada y el homicidio doblemente calificado en perjuicio de Carlos Antonio Domínguez; los delitos de sustracción de persona con el fin de obligarla a hacer algo o tolerar algo contra su voluntad y homicidio doblemente calificado de Néstor Dinotto.
También se lo condenó por los delitos de lesa humanidad cometidos en perjuicio de Graciela Martini, Hugo Daniel Pastorini, Adelaida Barpin y Leonardo Guillermo Miceli. En tanto, Castillo fue absuelto por el “beneficio de la duda” respecto de la privación ilegal de la libertad de Roberto Fiandor, consumada el 12 de febrero de 1976.
“Ordénase la inmediata libertad de Pomares”, cuando el Tribunal dio lectura a esa parte de la sentencia las víctimas, familias y asistentes a la audiencia estallaron en gritos y llantos, por lo que los jueces dispusieron el desalojo de la sala. Las querellas de las víctimas calificaron de “vergonzosa” la absolución y adelantaron que apelarán el fallo una vez que conozcan los fundamentos de la sentencia, en febrero de 2018.
"Lo importante es que los hechos fueron considerados probados, se probó que la CNU cometió delitos de lesa humanidad en nuestra ciudad y eso es muy importante”, señaló la abogada Marta Vedio, de la APDH de La Plata y de la Unión por los Derechos Humanos.
Vedio, en diálogo con la agencia Télam, expresó su "total rechazo" a la absolución de Pomares, al considerar que estaba probada su participación en los crímenes y fue parte del grupo más violento de la CNU. "Por eso, con esta convicción, vamos a ir a Casación para que revea el fallo”, confirmó.
