El párroco en la Isla Maciel, Francisco “Paco” Olveira, consideró que “nunca” en la historia reciente del país “estuvimos tan mal en materia de violencia institucional como ahora” y advirtió que, en la medida que el Gobierno siga “dejando de lado” a los sectores más vulnerables de la sociedad, “esa gente va a salir a pedir por sus derechos”.

“Estamos en una democracia formal pero estamos perdiendo el Estado de Derecho”, cuestionó el sacerdote reconocido como “Padre Paco”. A tono con la carta que ayer publicó el Grupo de Curas en la Opción por los Pobres -del que él es integrante-, el religioso recordó que desde hace tiempo se viene denunciando que “este modelo no cierra sin represión”, y puntualizó que las pruebas están a la vista.

“Tenemos dos muertos en muy poco tiempo”, dijo en alusión a Santiago Maldonado y Rafael Nahuel, los dos jóvenes que murieron en el marco de sendas represiones de las fuerzas de seguridad a reclamos de la comunidad mapuche, en la Patagonia. “Hay un aumento de la represión absolutamente justificada por el Gobierno”, lamentó el cura.

En este sentido, comparó el accionar de las fuerzas públicas con otros años desde el retorno de la democracia en 1983 y sostuvo que “nunca estuvimos tan mal en materia de violencia institucional como ahora”. Puntualizó que, en los últimos años, la policía y las demás fuerzas federales estaban “encuadradas” de tal modo que no se producían tantos hechos de violencia. Sin embargo, “ahora el discurso oficial es actúen, hagan, tiren”.

Lo que también le “molesta”, dijo, “es la doble vara: ¿por qué no reprimen a Joe Lewis (el empresario y amigo del presidente Mauricio Macri) que tiene Lago Escondido para él solo, y sí a dos mapuches que salen a pedir por sus derechos?”, se preguntó.

Por otra parte, el cura rescató que haya sectores adentro de la Iglesia católica que “están empezando a comprometerse en concreto con determinadas causas”, como en Bariloche, donde el obispo local, Juan José Chaparro, es parte de la mesa de diálogo abierto entre las comunidades mapuches y la Justicia, tras el asesinato de Rafael.

“Es muy extremo lo que está pasando en Bariloche. Desde el Gobierno dijeron que hubo un enfrentamiento armado (entre prefectos y mapuches). Eso lo decían de la dictadura”, comparó.