“Escuchanos, miranos, acá estamos, no vas a poder con no- sotros.” Alberto se sacó la gorra con visera con la que se autopropiciaba un poco de sombra y miró hacia la Casa Rosada. El “no vas a poder con nosotros” se lo dedicó al presidente Mauricio Macri luego de que alguien en la Plaza de Mayo dijera que lo había visto asomarse por la ventana del balcón rosado. El hombre siguió caminando alrededor de la Pirámide de la Plaza, donde hacía poco menos de una hora había comenzado una nueva edición de la Marcha de la Resistencia de las Madres de Plaza de Mayo. “Hay que salir a la calle para que no haya más despidos”, insistió la titular de la Asociación, Hebe de Bonafini. “Se resiste a la impunidad que hoy está en manos de este Gobierno y de la Justicia”, remarcó en representación de la Línea Fundadora, Nora Cortiñas. Las reformas previsional y laboral, los tarifazos, el desempleo, la violencia contra la protesta social y los pueblos originarios; Santiago Maldonado y Rafael Nahuel; la prisión preventiva de Milagro Sala y, desde ayer por la mañana, ordenada por el juez federal Claudio Bonadio a un grupo de ex funcionarios entre los que figura la ex presidenta y senadora; Cristina Fernández, no faltaron en el universo simbólico de la mítica manifestación que ayer inició su versión número 37. 

“Son días tristes, amargos, pero tenemos que estar felices a pesar de todo porque somos capaces de todos los días llenar una plaza”, reflexionó Bonafini cuando, vencida la tarde, habló ante una Plaza de Mayo desbordada. De manera coincidente, la nueva edición de la Marcha de la Resistencia se combinó con una convocatoria realizada por agrupaciones políticas y sociales para reclamar en Plaza de Mayo “contra la persecución política” tras las novedades judiciales de la mañana de ayer. Al respecto, Bonafini remarcó que “Cristina conducción” es “siempre una esperanza”, cantó con los manifestantes “Che gorila, che gorila, no te lo decimos más, si la tocan a Cristina qué quilombo se va a armar” y completó: “Si la tocan se va a desatar una tormenta de diez plazas llenas como ésta, el pueblo la va a desatar, así que ojito Macri”.

La Asociación que lidera Bonafini decidió incorporar a los trabajadores en el lema que lidera la seguidilla de rondas de 24 horas que culminará hoy a las 17: “La falta de trabajo es un crimen que alguien debe pagar”, advirtió la consigna detrás de la que Madres, gremios –la Corriente Federal de Trabajadores, ATE Capital, Curtidores, CTA de los Trabajadores, Sitraju, SatSaid, Atilra, trabajadores del Subte y Sadop, entre otros– y militantes de agrupaciones políticas ligadas al kirchnerismo, como la Cámpora y Peronismo Militante se encolumnaron. “Los trabajadores son los protagonistas de esta marcha, es importantísimo que mañana (por hoy) seamos el doble que hoy (por ayer)”, insistió Bonafini durante su discurso. Esta tarde clausurarán la Marcha de la Resistencia los dirigente de Ate Capital, Daniel Catalano, y su par del Sindicato de Obreros Curtidores, Walter Correa. “Hay que resistir para que no haya más despidos, hay que salir a la calle”, concluyó la Madre y advirtió que “a todos los que voten esas leyes de mierda los va a juzgar el pueblo en la plaza” en relación a las reformas laboral y previsional.  

Del otro lado de la Pirámide, la Línea Fundadora de Madres, Abuelas y Familiares de Desaparecidos Detenidos por razones Políticas compartió reparo solar con la Asociación de Exdetenidos Desaparecidos, la Liga Argentina por los Derechos del Hombre y la Comisión Memoria, Verdad y Justicia Zona Norte que, al cierre de la tarde, leyeron un comunicado conjunto. “Ante la violencia, los ataques a los trabajadores, y el ajuste, la resistencia”, resumió Cortiñas bajo el reparo de un gazebo desde donde también se quejó del “disparate” de “la andanada de presos sin proceso, sin garantías, arbitrariamente. Es un abuso de autoridad de parte de la Justicia”. “Convocamos a todas y todos los que quieran vivir en una sociedad donde se respeten de garantías constitucionales a comprometerse con su patria y defender sus derechos”, sumó la presidenta de Abuelas de Plaza de Mayo, Estela de Carlotto.   

“A 37 años seguimos resistiendo con memoria; no nos olvidamos y es lo que más les molesta”, replicó Lita Boitano las prisiones preventivas ordenadas por Bonadio y a “esta otra serie de golpes duros que venimos aguantando, los proyectos de reformas previsional y laboral, los despidos, el submarino, Milagro Sala, Santiago Maldonado, Rafita”. “Es mucho, es deprimente retroceder tanto”, se lamentó, pero vislumbró la solución:”Solamente juntos y en la calle vamos a poder resistir a estos embates y de transmitirnos afecto, lucha y aguante”.