El plástico de los envases y botellas descartables tarda miles de años en biodegradarse y genera islas de contaminación en todos los mares del mundo. Por eso se investiga en alternativas sustentables. En esa actividad, la empresa SodaStream desarrolló un sistema de dispensadores de agua con gas que reduce sustancialmente la fabricación y el desperdicio de botellas de plástico de un solo uso. Son envases de un plástico especial que admite hasta tres años de uso, están libres de BPA y no están fabricados con policarbonato, material o sustancia que produzca emisiones contaminantes. “En la Argentina, alrededor de 43 millones de botellas de plástico de un solo uso se producen todos los días y terminan debajo de la tierra y océanos. Es una escena terrible, pero con SodaStream podés disfrutar de agua fresca y brillante con simplemente tocar un botón, sin contaminar el planeta”, expicó Daniel Birnbaum, CEO de la empresa.