El ex secretario Legal y Técnico Carlos Zannini, detenido por orden del juez federal Claudio Bonadio, fue trasladado desde Río Gallegos a Buenos Aires donde, previo paso por los tribunales de Retiro, fue llevado al penal de Ezeiza. Esposado y con chaleco antibalas y casco, tal la usanza predilecta del Ministerio de Seguridad, Zannini bajó del avión custodiado por una decena de miembros de las fuerzas federales. Viajó en el vuelo 1883 de Aerolíneas Argentinas y llegó a Comodoro Py minutos antes de las 7, en una camioneta rodeada de al menos seis motocicletas de la Policía Federal hacia Comodoro Py.

En la sede judicial cumplió los trámites de rigor en el juzgado de Bonadio. 

Marcelo Fragueiro, el abogado de Zannini, cuestionó su detención. Dijo que no corresponde por el ex funcionario no puede entorpecer la causa teniendo en cuenta que las medidas de prueba ya están tomadas. Con todo, explicó que desistió de pedir la eximición de prisión porque Bonadio la rechazará y precisó que el lunes apelará lo resuelto por el magistrado y objetará el eje de su decisión. Fragueiro contó también que el miércoles, un día antes de su detención, el ex secretario de Legal y Técnica fue seguido por un vehículo, por lo cual fue a la policía de Río Gallegos para averiguar el motivo del seguimiento. El abogado reveló que “le dijeron que no tenía orden de arresto, pero que había tareas de inteligencia en su persona”.