Los bonaerenses, tanto residentes en el conurbano como en las localidades del denominado "interior", desaprueban la gestión del gobierno nacional en proporciones similares. Mientras en el Gran Buenos Aires el rechazo al gobierno de Javier Milei es de 51,9 puntos y la aprobación de 42,9, en el resto del territorio provincial el rechazo asciende a 54,5 y la aprobación es de 42,6.
El dato, proveniente de un reciente trabajo de la empresa Management & Fit, que suele brindar sus servicios de consultoría al gobierno, desafía el dato de que los sectores socialmente más conservadores apoyan al actual oficialismo.
Pero, además, tiene un correlato electoral. Tras una breve meseta, volvió a crecer con fuerza en la provincia la cantidad de gente que votará en octubre a un candidato opositor a Milei. Eran 48,6 por ciento en febrero, bajaron un punto en marzo y en abril volvieron a aumentar, hasta 50,6.
La caída de los bonaerenses dispuestos a votar un candidato oficialista José Luis Espert es aún más pronunciada. Eran 43,3 en febrero, subieron un punto y medio el mes siguiente y ahora cayeron por debajo de 40.
En otro orden de cosas, el 60 por ciento de los bonaerenses considera que la disputa entre Axel Kicillof y Cristina Fernández de Kirchner debilita las chances electorales del peronismo en general. El 17 cree que es irrelevante y apenas el 12 sostiene que lo beneficia.
Es la economía, estúpido
A nivel nacional, la inflación vuelve a ser la principal preocupación de los argentinos, con un salto de casi cinco puntos en el último mes, de 16,8 a 21,7, desplazando a la inseguridad.
Otor dato relevante es el crecimiento sostenido de la corrupción como preocupación, a razón de un punto por mes, desde que estallara el escándalo por la estafa con la criptomoneda Libra en febrero pasado. Ahora se encuentra en 17,2, y empata con la inseguridad en el segundo puesto.
Más del 50 por ciento de los consultados sostiene que la política arancelaria de Trump tendrá un fuerte impacto negativo sobre las exportaciones argentinas, frente a un 20 que cree que no tendrá consecuencias y apenas un 15 que dice que será positivo, sin explicar cómo.
Los números son más contundentes en cuanto a la percepción de la evolución de la pobreza. El 66,6 sostiene, a contramano del discurso oficial, que la pobreza, lejos de disminuir, aumentó. Apenas el 29, menos de un tercio, adhiere a la versión del gobierno. Esta percepción es aún más generalizada entre las mujeres: ya alcanza al 71.
La encuesta fue realizada entre los días 14 y 28 de abril pasados, sobre una base de 2600 casos y un margen de error de 2,1 puntos a nivel nacional y 800 casos y un margen de error de 3,5, en ambos casos respetando cuotas de sexo, edad y nivel educativo según censo nacional de 2022, con método de recolección telefónico a números móviles y fijos.
Por otro lado, en el informe de abril del ya tradicional "Domingo de datos", que cada mes elabora la firma Zuban Córdoba, da cuenta de una serie de reveses para el gobierno, que no se limitan al plano económico, donde el 65 por ciento observa un aumento de la inflación a partir de la devaluación, aunque esta haya sido presentada como "salida del cepo". También aumentó, en este caso a 53 por ciento, la desconfianza en las capacidades de Milei para resolver la crisis económica.
Por otro lado, en materia geopolítica, ni siquiera el núcleo duro libertario comparte la política de genuflexión hacia el presidente estadounidense Donald Trump: el apoyo a esa política ronda el 19, el alineamiento con China tiene una popularidad del 21 por ciento y la opinión rotundamente mayoritaria es la neutralidad (55).
En materia de imagen internacional, el 54 por ciento de los consultados observa que la proyección de Argentina en el mundo se ha deteriorado desde que Milei es presidente, frente a un 41 que esgrime la opinión contraria.
El estudio también enciende una luz de alerta en la oposición: el 54 por ciento de la muestra cree que la oposición no tiene un plan económico. Esa carencia (o su percepción) puede funcionar tanto como límite a la caída de Milei como a la acumulación, por parte de otro espacio político, de los apoyos que Milei va dejando en el camino.
La confianza también, afuera
Otro estudio que los gobiernos siguen con interés es el Índice de Confianza en el Gobierno (ICG), que desde hace más de dos décadas elabora la Escuela de Gobierno de la Universidad Torcuato Di Tella (UTDT).
En su reciente medición de abril, el indicador anota una caída de 3,7 puntos respecto de marzo y se trata de la quinta caída consecutiva y creciente. Tras un repunte de 9 puntos en noviembre de 2024, el al 2025 comenzó con una leve caída de 0,3. Desde entonces, no dejó de caer hasta ubicarse en 2,33. Sin embargo, el piso del ciclo Milei fue en septiembre pasado, con un índice de 2,16.
El trabajo también compara la confianza del mandatario con la de sus antecesores, en el mismo momento del mandato, es decir, en abril de 2017 con Mauricio Macri y de 2021 con Alberto Fernández. Milei, a igual tiempo de mandato transcurrido despierta menos confianza que Macri y más que Fernández.