A Keylor Navas se le pasó ayer el "dolor de panza" que le impidió jugar el domingo ante Independiente Rivadavia de Mendoza y confesó sus deseos de desvincularse. El pedido se lo hizo al presidente Ignacio Astore. Y desde entonces se inició una negociación donde los leprosos intentarán sacar la mayor ventaja económica posible, con la debilidad de que al arquero de la selección de Costa Rica se le debe gran parte del dinero prometido para los primeros seis meses del año, los cuales jugó ya con la rojinegra. Su vínculo vigente es hasta fin de año y lo quiere contratar Pumas de México.

Hace años que la dirigencia de Newell’s tiene problemas en la relación con sus jugadores y a las deudas económicas se le agrega a que si no se habla con el presidente Astore no hay a quien más se le pueda hacer un planteo en el club. 

En Newell’s la mayoría de los jugadores se van antes de cumpir su contrato, en general con futbolistas que se traen como refuerzo y después con su rendimiento no justifican su contratación. Una excepción fue Navas, quien llegó al Coloso del Parque con seis meses de inactividad y se consagró como el mejor jugador del equipo en el pasado torneo Apertura.

Navas se fue en junio a jugar con la selección de Costa Rica, su familia ahora no quiere volver a la ciudad a terminar el contrato que vence en diciembre y la situación explotó en Mendoza. Navas se reintegró a menos de 48 horas del debut del equipo en el Clausura y el domingo acusó “dolores estomacales” para no jugar ante Independiente Rivadavia de Mendoza. Nadie le creyó, claro, y ayer, ya sin dolores de panza, Navas le pidió a Astore desvincularse de Newell’s. El arquero no volverá a vestir la rojinegra. Pero para concretar su salida hay aún mucho por hablar.

Navas se quiere ir a Pumas de Mexico, club que le hizo una oferta por dos años. El club azteca le ofreció a Newell’s dos millones de dólares por el pase del arquero. Navas es jugador leproso hasta fin de año. Su contrato tiene una cláusula de renovación por otro año más. Es por eso que Astore reclama tres millones de dólares para desprenderse de Navas. 

La negociación se inició en las últimas horas y el final es previsible: Navas se irá. La incertidembre descansa en cuánto podrá imponer condiciones Astore en la negociación dado que al arquero aún no se le pagó lo que ya jugó en el club, situación que se replica en todos los jugadores de la institución. Navas sugirió que no quería volver una vez que se fue de la ciudad para sumarse a su selección, stiuación que dio cuenta este diario en su edición del pasado 2 de junio. El arquero se queda algunas horas más para lograr un acuerdo a su salida. Hoy ya no entrenará con el plantel.