A través de un duro cuestionamiento al gobierno nacional por las políticas de ajuste que golpean contra los sectores más desprotegidos de la sociedad, la expresidenta Cristina Kirchner convocó a la militancia peronista a trabajar en las próximas elecciones con “mucha potencia” para que el oficialismo “tenga su merecido en las urnas”. El mensaje de la titular del Partido Justicialista (PJ) que cumple con detención domiciliaria producto de la proscripción y condena por lawfare fue lanzado en general pero a través de un saludo particular dirigido a militantes reunidos en la localidad bonaerense de Quilmes. Una convocatoria que luego se reprodujo con una muestra de unidad cuando ayer se encontraron Axel Kicillof, Verónica Magario y Mayra Mendoza en el cierre del Encuentro Bonaerense de Ciencia.

La exmandataria pidió militar con “mucha potencia” porque, según dijo, esa condición es la que “se necesita para que estos tipos que están hambreando a la gente tengan su merecido en las urnas”. La voz de CFK se hizo oír a través de la intendenta local Mayra Mendoza, quien la llamó y pidió unas palabras para los hombres y las mujeres que estaban en esa reunión.

“Compañeros, compañeras, acá me dijo Mayra recién que están en un plenario, como corresponde a los militantes”, dijo y los elogió por estar “organizándose para salir a militar a las calles por el peronismo”. Luego los llamó a profundizar el trabajo territorial y cuestionó (aunque sin mencionarlos) al mileísmo: “Mucha fuerza, mucha potencia, porque se necesita para que estos tipos que se están hambreando a la gente tengan su merecido en las urnas”.

“Un abrazo grande y a militar como siempre lo hacemos: de corazón, con la cabeza, con el corazón, con mucho amor también. Y con el coraje que siempre lo hacemos”, cerró.

El nuevo contacto de CFK con la militancia peronista fue dado a conocer por Mayra Mendoza a través de sus redes sociales. Allí publicó el video de ese instante en un plenario de cara a la campaña rumbo a las próximas elecciones legislativas provinciales de septiembre, y nacionales de octubre.

La intendenta agradeció a la expresidenta por impulsarlos “a salir a caminar las calles con más fuerza que nunca” y “reforzar el diálogo que venimos teniendo a diario con nuestros vecinos y vecinas sobre el daño que le causa Javier Milei al pueblo argentino y al bonaerense en particular”.

“Con cabeza, corazón y coraje, vamos a redoblar esfuerzos para que los y las bonaerenses elijan la boleta de Fuerza Patria, que es la única capaz de ponerle un freno a este presente de exclusión social, destrucción económica y crueldad”, agregó. De la misma manera, Mendoza volvió a exigir “la libertad de Cristina, que es una amenaza del poder real a través del partido judicial contra todos aquellos que nos oponemos al régimen libertario”.

Ayer, en tanto, Mendoza, Kicillof y Magario se mostraron juntos por primera vez en un acto que se realizó en la Universidad Nacional de Quilmes. Se trataba del cierre del Encuentro Bonaerense de Ciencia donde el gobernador anunció la convocatoria a becas doctorales de la Comisión de Investigaciones Científicas (CIC) para estudiantes afectados por los recortes del gobierno nacional. Luego indicó que “ellos se denominan La Libertad Avanza, pero en materia de derechos y de igualdad de oportunidades, representan una libertad que atrasa”, dijo para luego dar cuenta de la destrucción de la educación y la ciencia por parte del gobierno de Javier Milei.

A su turno, Mendoza indicó que “si hay algo que a todas y todos los argentinos nos une es que comprendemos que la educación pública, gratuita y de calidad es un pilar fundamental para nuestra democracia y para la construcción del progreso de nuestro país”, resaltó. (ver Buenos Aires/12)


El balcón de hierro

Ayer, en tanto, Cristina Fernández de Kirchner volvió a asomarse y saludar desde el balcón. Y es que el movimiento empezó temprano frente a San José 1111, el domicilio de la expresidenta cuando un grupo de militantes se acercó con rosarios, velas, banderas y una consigna clara: rezar por su libertad. La escena, que mezcló liturgia y militancia, terminó con la expresidenta asomándose al balcón para saludar. Fue un gesto corto, pero no menor. Cristina salió al balcón, miró hacia abajo y levantó la mano. No habló, pero su presencia bastó para encender el entusiasmo de los que estaban ahí. La reacción fue inmediata: aplausos, gritos, emoción y celulares en alto para registrar el momento.

La convocatoria se organizó por redes sociales. Un centenar de personas -en su mayoría mujeres, jóvenes y adultos mayores- se juntó para rezar el Rosario y pedir por la liberación de la actual presidenta del Partido Justicialista. En redes, el video del saludo se viralizó con los hashtags #CristinaLibre y #RosarioPorCristina. “Vinimos porque creemos que lo que están haciendo con ella no es justo. Es una persecución política disfrazada de causa judicial”, dijo Carolina, que llegó desde Avellaneda con su mamá. Al igual que muchos otros, se fue con la sensación de que valió la pena: “Ella siempre sale a dar la cara”. Aunque no hubo despliegue masivo ni estructuras partidarias, el mensaje fue claro: su figura sigue movilizando.