Además de las chicas, en los grupos había algunos varones. L. fue llevada por su novio. Y dice que si no hubiera sido por él, ella no hubiera participado de nada porque desde un principio Bugliani le provocó rechazo: “Yo sabía que si me alejaba de Leonardo me alejaba de mi novio. Él sigue ahí. Yo me fui y cree que yo estoy muerta en vida, que negocié con esta sociedad”, relata.

Todas son conscientes de que si bien los varones también fueron manipulados tenían otro lugar en el grupo. Dice L: 

–Leonardo apuntaba sexualmente a nosotras. Ellos no estaban en situación de riesgo real. Ellos están en un lugar de poder. La manipulación les habilita a manipular. Leonardo les decía que tenían que desvirgar a las que les faltaban.

L. participó en el taller del Sabato y en la casa de Leonardo Bugliani durante 2015 y 2016. 

Para L. todo ese tiempo fue de “muchísima confusión”. “La sexualidad como motor de todo cambio, decía Leonardo literalmente... Decía que si tenés algún tipo de afecto tenés que tener algún vínculo sexual. Incluso me llegué a plantear si tenía que estar con mi mamá porque la quiero...”, cuenta ella.

También dice que el hecho de que hubiera varones de su misma edad facilitaba la inducción de las chicas. A todas les preocupa que tanto el ex de L. como otro joven sigan con Bugliani y estén armando nuevos grupos. “Son Leo en mini. Hablar con ellos es hablar con Leonardo. Publican textos en Facebook que son la ideología del Ágora.”, cuenta J.