El gobierno turco reintegró mediante un decreto a 1823 funcionarios que habían sido destituidos después del fallido golpe de Estado contra el presidente Recep Tayyip Erdogan, en julio de 2016.

Los 1823 funcionarios habían sido cesados después de la intentona golpista acusados de haber descargado ByLock, una aplicación de mensajería cifrada que el gobierno considera la herramienta de comunicación privilegiada de los golpistas. Sin embargo, a fines de diciembre las autoridades anunciaron que dicha aplicación había sido descargada por miles de personas sin saberlo.

Más de 140.000 personas fueron destituidas o suspendidas de las instituciones turcas después del fallido golpe de Estado imputado por el gobierno al predicador Fethullah Gölen, residente en Estados Unidos, que rechaza las acusaciones. Las purgas desatadas por el gobierno tras el intento de golpe, extendidas a los activistas prokurdos y los medios de comunicaci¢n, llevaron a la encarcelación de 55.000 personas.

Entre las personas reintegradas a sus funciones figuran en particular 544 empleados del ministerio de Educación, 458 de la direcci¢n general de Seguridad y 204 del Ministerio de Salud. Los funcionarios reintegrados recibirán la totalidad de los salarios correspondientes al período en que estuvieron cesados pero no tendrán derecho a compensación.

Por otra parte, el mismo decreto anuncia el alejamiento definitivo de la función pública de 262 personas.