Un bombero de la Policía de la Ciudad, el suboficial Adrián Gustavo Otero, será juzgado por el homicidio de Cristian Ramón Toledo Medina, de 24 años, ocurrido en la Villa 21-24 de Barracas a mediados del año pasado, informaron ayer fuentes judiciales. Otero es el primer policía de la Ciudad en llegar a juicio por un caso de gatillo fácil, según precisó la abogada de la Coordinadora Contra la Represión Policial e Institucional (Correpi), María del Carmen Verdú. La elevación a juicio fue dispuesta por el juez de instrucción Osvaldo Rappa, quien había ordenado la prisión preventiva del policía por el delito de “homicidio agravado por el uso de arma de fuego y abuso de su condición de integrante de una fuerza de seguridad”, y lo había procesado por “tentativa de homicidio” en perjuicio de los dos amigos de Toledo Medina que se encontraban con él al momento del hecho. El asesinato del joven ocurrió el sábado 15 de julio a las 7.30 en el cruce de la avenida Vélez Sarsfield y Australia. Toledo Medina viajaba como acompañante en un auto Alfa Romeo junto a sus dos amigos. Según la versión del policía procesado, el joven intentó robarle, pero él se identificó como policía y los del auto intentaron escapar. Otero dijo que le disparó “a las ruedas”, hasta que el auto chocó en la esquina de Vélez Sarsfield y Santo Domingo. El juez Rappa señaló en la resolución de elevación a juicio que “Otero continuó disparando y se colocó con su auto junto al lado izquierdo del otro vehículo en que viajaban las víctimas y, con la intención de quitarle la vida, efectuó al menos tres disparos”. Uno de ellos provocó la muerte de Toledo Medina.