Los trabajadores despedidos del Instituto Nacional de Tecnología Industrial recibieron ayer el apoyo de referentes del sistema científico y universitario en la asamblea permanente que mantienen en la entrada de la sede del organismo, en la colectora de la Avenida General Paz, en Villa Pueyrredón. “Es exasperante el discurso que tienen los dueños de negocios que está saqueando el país, que regatean la apuesta al avance tecnológico en la Argentina”, apuntó la investigadora Dora Barrancos, integrante del directorio del Conicet, al cierre de una de las mesas de debate que tuvieron lugar ayer y que reunió, entre otros, a los también investigadores Alejandro Grimson, Diego Hurtado y Leandro Monsalve. Antes, participaron Guido Galafassi y el trabajador del INTI Bruno de Alto. Ambos paneles fueron moderados por Inés Nercesián, de la agrupación de Científicos y Universitarios Autoconvocados. Cerró la jornada el Ballet Nacional de Danza, al que el Gobierno le retiró financiamiento recientemente.