El secretario general de los Camioneros, Hugo Moyano, advirtió que el Gobierno “está logrando” una CGT subordinada y también le restó importancia a la decisión de dirigentes de gremios importantes que anunciaron que no acompañarán la marcha que Camioneros realizará el próximo 21 de febrero. “Hay ausencias que suman”, afirmó el ex jefe de la central sindical. Fue al término de una jornada en la que el titular del gremio de la Alimentación, Rodolfo Daer, hermano de Héctor, uno de los triunviros de la CGT, sostuvo que el movimiento obrero no puede estar supeditado a los “caprichos” de los dirigentes gremiales. “Prefiero ser caprichoso y no traicionar al trabajador”, le retrucó Pablo Moyano. 

Moyano habló de la movilización y el paro de su gremio y del escenario que se planteó en la CGT frente a la convocatoria tras la conferencia de prensa acompañó al presidente de la AFA, Claudio Tapia, para agasajar a la bella embajadora del Mundial de Rusia, Victoria Lopyreva. “Al Gobierno le conviene una CGT subordinada, no dividida, y eso es lo que están logrando”, aseguró Hugo Moyano y respondió a las acusaciones que le hacen: “Dicen que no tengo que hacer la marcha y presentarme en la Justicia, pero ¿a qué me voy a presentar si no estoy involucrado en nada? Es todo verso”, respondió.

De la falta de respaldo de algunos gremios a la movilización y sobre las críticas por parte de gordos e independientes, se ocupó su hijo Pablo, quien le apuntó en particular a Rodolfo Daer. “El movimiento obrero no puede estar (supeditado) a los caprichos de ningún dirigente, más allá de los problemas que tenga”, había dicho más temprano el líder del gremio de la Alimentación. La completó con otra frase: “La marcha en función de intereses individuales y caprichosos de tal o cual dirigente no hace bien al movimiento obrero y lo aísla.”

Para el dirigente del gremio de la alimentación “Moyano está solo porque él se quedó solo”, e insistió en que “no puede arrastrar al conjunto del movimiento obrero” en función de sus intereses. “Es un gobierno que fue electo por la mayoría del pueblo argentino, tiene que cumplir su mandato como marca la Constitución, a nosotros nos eligen para defender los intereses colectivos del conjunto del movimiento obrero, no de una organización o situación particular”, sostuvo en otro tramo de la entrevista. 

“Prefiero ser caprichoso y no traicionar al trabajador”, respondió Pablo Moyano. También recordó que Rodolfo Daer “siempre fue obediente a los gobierno de turno, es un gran aliado de los empresarios y del Ministerio de Trabajo y en los 90 entregó parte de las conquistas de los trabajadores”. “Primero con el gobierno de Menem permitió decenas de millares de despidos y cierres de fábricas, luego con el gobierno de Fernando de la Rúa dejó que se apruebe la ley Banelco de flexibilización laboral, con las coimas del Senado, para culminar con el gobierno de Duhalde y su enorme impacto devaluatorio al salario obrero”, completó.

Mayoritariamente quienes se mostraron contrarios a la marcha del 21 han sido los gremios enrolados en los sectores de los “gordos” y de los “independientes”. Ayer, el jefe de la Unión Ferroviaria y a quien se menciona como uno de los candidatos para encabezar la futura CGT, Sergio Sasia, definió esta etapa del movimiento obrero como “un verdadero cabildo abierto”. “Es una convocatoria desprolija y sectorial. Hay que llamar de una vez por todas a un nuevo Comité Central Confederal y sentar las bases de una agenda de diálogo con el gobierno, en la que el movimiento obrero tenga la iniciativa, a partir de propuestas propias. No es posible estar a la defensiva”, afirmó Sasia, también tomando distancia de la movilización.

Para Sasia, se impone una inmediata convocatoria a un plenario de secretarios generales para “saber qué queremos” en la CGT: “Esto no va más. Hay que barajar y dar de nuevo”.