Las salidas que el Gobierno y la coalición oficialista proponen como paliativos al brutal ajuste de las tarifas de los servicios públicos no convencen a la oposición parlamentaria, que volverá a abroquelarse contra el tarifazo con dos propuestas paralelas en la Cámara de Diputados. Hoy habrá un plenario de comisiones en el que comenzarán a discutirse los distintos proyectos que intentan ponerle freno a los aumentos de los servicios esenciales. Para mañana hay convocada una sesión especial solicitada por los bloques de Argentina Federal y el massista Frente Renovador, que también incluyó al Movimiento Evita y al que se sumará todo el arco opositor para alcanzar el quórum y obligar a Cambiemos a dar el debate legislativo por las tarifas que esquivó el miércoles pasado. 

Las distintas convocatorias en la Cámara baja contra el tarifazo fueron las respuestas opositoras a las propuestas oficialistas de promover el pago de las facturas de gas en cuotas con intereses y cargar sobre los presupuestos provinciales el sostenimiento de la tarifa social en distintos servicios.

Todo el arco opositor volverá a insistir este miércoles en una sesión especial para tratar en el recinto las distintas iniciativas que proponen poner límites al tarifazo en los servicios públicos y que se frustró la semana pasada porque faltó apenas un diputado sentado en su banca para reunir el quórum para sesionar. 

El oficialismo que celebró entonces su boicot de la sesión detrás de los cortinados del recinto, ahora modificaría su actitud y daría el debate con la certeza de contar con las manos suficientes para bloquear el tratamiento de los proyectos opositores que necesitan de dos tercios de los votos porque no cuentan con dictámenes de comisión. 

Sin embargo, tampoco Cambiemos pudo avanzar en su estrategia de dividir a la oposición exacerbando las diferencias entre los distintos bloques peronistas. A diferencia del miércoles pasado, donde la sesión especial había sido convocada por el kirchnerismo y los bloques más duros con el oficialismo, esta vez la convocatoria surgió de los sectores más dialoguistas: Argentina Federal –que responde a un grupo de gobernadores peronistas– y el Frente Renovador. Allí también estampó su firma en el Movimiento Evita y que acompañará el gruesos de al oposición legislativa en la Cámara baja. 

En tanto para hoy por la tarde está convocado un plenario de las comisiones de Obras Públicas y Defensa del Consumidor que encabezan los diputados Sergio Ziliotto (AF) y Marcela Passo (FR), respectivamente. Allí, federales y massistas buscarán avanzar con el proyecto común que propone acotar los aumentos de los servicios a los ingresos salariales.

También fue notificada la comisión de Presupuesto –de necesaria competencia cuando se trata de temas económicos vinculados a la gestión de Gobierno–, donde su presidente, el macrista Luciano Laspina, suele frenar cualquier iniciativa opositora. Sin embargo, la estrategia trazada por ambas bancadas opositoras previó cómo saltar el obstáculo con un recurso reglamentario de la propia Cámara: el artículo 102 establece que si la comisión de Presupuesto no se pronuncia en un plazo de 30 días sobre iniciativas que involucran a otras comisiones, el proyecto podrá llegar al recinto con el dictamen de las restantes. Donde ya no necesitará de dos tercios los votos para su tratamiento y podría aprobarlo por mayoría simple de los votos para que pase al Senado.  

El conglomerado opositor confluirá en ambas iniciativas. Ayer por la noche cada bancada analizaba cuales serían los proyectos propios que llevarán hoy al plenario de comisiones y mañana al recinto de la Cámara baja para incorporarlos al temario de la sesión especial. La disputa opositora de egos y protagonismos cedió ante la necesidad de coincidir en puntos mínimos para ponerle freno al tarifazo, que el gobierno se niega a retrotraer y cuyo costo económico y político quiere volcar sobre las provincias.