Esta mañana se produjo una masiva protesta frente a la sede de la Fiscalía N° 23 de Malvinas Argentinas para repudiar la resolución que ayer rechazó la excarcelación a Paola Córdoba (38) y Milagros Naiaretti (18), quienes mataron de 185 puñaladas a Alberto Elvio Naretti para terminar con décadas de violencia intrafamiliar. A pesar de que la esposa de Naretti había presentado numerosas denuncias por violencia de género contra su pareja y que la escuela de la joven había advertido sobre “episodios de tortura”, la fiscal Silvia Bazzani apeló en la víspera el fallo del juez de garantías de San Martín, Alberto Brizuela. El magistrado había dictado la “excarcelación extraordinaria” de las dos mujeres por considerar que ambas habían sufrido violencia de género.  

En su resolución, el magistrado había impuesto como condición para la excarcelación que madre e hija permanecieran los primeros 30 días de libertad en la casa de una hermana de la primera y que no se alejaran a más de 100 kilómetros mientras continuaba la investigación. Pero antes de ordenar su liberación resolvió notificar a la fiscal, quien finalmente rechazó la medida. Ahora será la Cámara Nacional de Apelaciones la que tenga que evaluar si se trató o no de un caso de legítima defensa. “No han escuchado a estas mujeres. Estamos hablando de una situación en la que un juez varón le otorgó la excarcelación y una fiscal mujer la apeló”, advirtió su abogado defensor, Andrés López. 

Los familiares de las acusadas, por su parte, denunciaron que la justicia “les dio la espalda” a Paula y Paola. La excarcelaciones de madre e hija habían sido pedidas por el defensor Javier Chirinos, quien consideró que ambas mujeres se defendieron de Naiaretti en una "situación de violencia de género histórica". "Consideramos que este hecho se realizó en una situación de violencia de género histórica, de muchos años, más de 20 años, que sufría Paola: violencia económíca, física, torturas y prostitución. Y no sólo ella sino también sus hijos", explicó el defensor.

“Estaba en riesgo la vida de mi hermana y de mi sobrina”, aseguró Gloria tras la muerte de Naiaretti. Según su testimonio, la noche del desenlace fatal la pelea entre las víctimas y su victimario, finalmente muerto, se desencadenó porque Naiaretti quería prostituir a su esposa y ella se negó.  

Naiaretti fue hallado asesinado el 9 de marzo último en su casa de 18 de Octubre 889, de José C. Paz. Su esposa fue quien llamó al 911 para avisar que lo había asesinado a puñaladas y como en la pelea también había intervenido la hija mayor del matrimonio, Milagros, de 18 años, ambas mujeres terminaron detenidas.

"Yo maté a mi marido porque sabía que él me iba a matar", declaró Paola .Milagros participó del ataque cuando vio que la vida de su madre corría peligro.