Las Letes en pesos se repartirán en cuatro series de $ 10.000 millones a 91, 119, 182, y 273 días, informó la cartera de Caputo. Respecto a la tasa, en el mercado esperan que esté por debajo de lo que pagan las Lebac para los mismos plazos (la de 104 días rendía 28,95%). 

Además de las letes en pesos, esta semana también se emitirán títulos públicos en dólares por US$ 900 millones a 210 días y una tasa del 2,83 por ciento (US$ 983,98 por cada US$ 1000 de valor nominal), y otros 800 millones de dólares a 364 días y un rendimiento de 3,10 por ciento (US$ 970,01 por cada US$ 1000).

En el mercado aseguran que, con esta nueva emisión, el Gobierno busca empezar a desarmar la bomba de tiempo que significa el altísimo nivel de bonos emitidos en Lebac, que hasta ahora garantizó una bicicleta financiera muy atractiva para los capitales golondrina. 

Según un reporte de la financiera Puente Hnos, si bien pueden participar de las colocaciones todas las personas físicas y jurídicas, el objetivo de Caputo es darles a las aseguradoras un instrumento para invertir luego de que se les prohibiera seguir comprando títulos en Lebac. “La emisión tendría como uno de los principales demandantes a las aseguradoras, las cuales deben ir reduciendo su stock de Lebacs hasta el 0 por ciento dispuesto por la Superintendencia de Seguros de la Nación”, indicó Puente.

De esta manera, el deudor dejará de ser el Banco Central y pasará a ser el propio Tesoro. El mercado también leyó esta emisión como el comienzo de un plan para desdolarizar la deuda y pasarla a pesos, de manera tal que el Tesoro quede afuera de las fluctuaciones y le permita, a su vez, al Banco Central liberar el tipo de cambio que, considera, está atrasado. Un presagio de una nueva devaluación.