Luego de la brutal represión desplegada ayer en las inmediaciones del Congreso, trabajadores de prensa agredidos por las fuerzas policiales brindaron una conferencia de prensa junto al Sindicato de Prensa de Buenos Aires (Sipreba), la Asociación de Reporteros Gráficos (Argra) y el CELS, en la que denunciaron un ataque premeditado a periodistas y fotógrafos con el fin de que no registren los hechos. 

De la conferencia participaron Pablo Piovano, fotógrafo de Página/12 durante veinte años, quien recibió 13 impactos de bala de goma disparados desde menos de un metro, y Federico Hauscarriaga, de la Red Nacional de Medios Alternativos, quien sufrió cuatro impactos de bala de goma.

El secretario de Derechos Humanos de Sipreba, Tomás Eliaschev, advirtió que hubo un “accionar increíblemente violento por parte de las fuerzas de seguridad”. “Se ha disparado contra el pueblo y contra la libertad de expresión. En el día de ayer hubo manifestaciones que no son producto de un loquito suelto sino que son parte de algo sistemático que ya se venía dando. El caso más dramático fue durante la marcha por aparición con vida de Santiago Maldonado, donde desataron aquella cacería, o el ataque en la marcha de mujeres o durante el desalojo a Pepsico. Ataques directos a la prensa, la libertad de expresión e intentos de censurar nuestro trabajo”, describió.

Eliaschev hizo un repaso de los trabajadores de prensa heridos en la manifestación de ayer, mientras intentaban cumplir con su trabajo. Además de Piovano y Hauscarriaga, también resultó lesionado el reportero gráfico Germán García Adrasti del diario Clarín (cuatro balazos de goma en el cuerpo), Leandro Teysseire, fotógrafo de Página/12, con un impacto en el abdomen; el camarógrafo de C5N Guido Rodríguez, quien recibió un balazo de goma en la zona abdominal; un cronista de América TV y los fotógrafos Pablo Cuarterolo y Marcelo Silvestro del Diario Perfil, también con balazos de goma. “Esto se suma a las agresiones que recibió nuestro compañero Nicolás Fiorentino del portal Letra P, a quien un empleado de seguridad de la Cámara de Diputados le pegó un cabezazo. Esto es un clima de violencia contra los manifestantes y puntualmente contra los trabajadores y trabajadoras de prensa", amplió Eliaschev.

A su turno, Piovano contó que fue agredido de “muy cerca, con premeditación, un policía federal que venía con moto. Yo estaba caminando, cubriéndome de los gases. Este policía me apuntó y disparó”. “Lo que están haciendo es querer enceguecer, silenciar. Son una serie de sucesos que atentan contra la democracia. No nos van a detener"”, señaló.

Hauscarriaga contó que estaban filmando sobre la avenida Rivadavia, cuando un policía les disparó. Entonces le mostraron la credencial de prensa y les volvió a tirar. Una vez más, insistió con su credencial, pero el policía siguió tirando. “No hay forma de buscarle la vuelta que se confundió. Una clara agresión al periodismo y a quienes estamos comunicando”, advirtió. 

Desde Argra, en tanto, denunciaron un intento de que “no hagamos nuestro trabajo, que no contemos ni mostremos lo que pasa. Ayer cinco reporteros gráficos asociados de Argra, además de Pablo, fueron atacados”. Mientras que desde el CELS advirtieron que desde ese centro de estudios habían “identificado que una de las herramientas que se estaban utilizando para afectar la libertad de expresión y el ejercicio de la protesta tenía que ver con la detención y criminalización. Lo que vimos ayer tiene que ver con el ejercicio directo de la violencia. Es un hecho muy grave”.

El cierre estuvo a cargo del secretario general del SiPreba, Fernando “Tato” Dondero, quien exigió la renuncia de la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich. También criticó al jefe de Gabinete, Marcos Peña, quien había dicho que los trabajadores de prensa fueron agredidos por manifestantes. “Es un cínico, pedimos rectificación. No vamos a bajar los brazos, vamos a seguir mostrando lo que pasa".