Asociaciones de consumidores se mostraron a favor del nuevo acuerdo de precios que regirá a partir del fin de semana. La idea de avanzar en un control de toda la cadena, desde la producción hasta la distribución en supermercados y almacenes, es uno de los puntos fuertes que destacaron los representantes de estas entidades. A su vez subrayaron la posibilidad de que estos acuerdos moderen la fuerte dispersión de precios por zonas y por productos de características similares. Esto no resulta menor si se tiene en cuenta la confusión que provoca entre consumidores, los cuales pierden la dimensión de lo que es caro o barato.

“Estos acuerdos parece que trabajarán sobre toda la cadena de valor de los productos. Hasta el momento, sólo se controlaba el precio final. Esta idea de custodiar también al eslabón de productores es un cambio relevante”, dijo Claudio Boada, de la Unión de Usuarios y Consumidores. Agregó que esta iniciativa apunta a limitar la expectativa inflacionaria, debido a que va a generar una mayor estabilidad de precios. A diferencia de lo que ocurrió durante los acuerdos del año pasado, en esta oportunidad la lista de productos tendría el mismo precio en todos los establecimientos de venta minorista que se incorporen de forma voluntaria a la medida de regulación del Gobierno.

Desde asociaciones de consumidores también valoraron que la iniciativa no presenta dificultades de administración. La cantidad de productos bajo acuerdo estará entre 180 y 200 artículos, cifra más fácil de controlar respecto de 500 bienes congelados durante el año pasado. “Que sean menos artículos resulta una característica importante, porque impide avivadas de comercios. No es lo mismo revisar qué pasa con 500 que con 200 productos, los cuales además estarán asociados a un consumo de primera necesidad”, apuntó Sandra Merlo, de Inducam. El mayor margen de control no sólo se limita al tema precios. “Una lista moderada de productos hace factible que la mercadería no desaparezca de la góndola y que en los supermercados exista disponibilidad.”

El otro aspecto favorable que indicaron en entidades de consumidores fue la masividad que alcanzaría la medida. “Lo bueno es que ahora se suman los supermercados chinos, donde los vecinos compran en el día a día. Por caso, ayer (por el 1º de enero) los únicos que estaban abiertos eran estos comercios de barrio y no los grandes establecimientos”, precisó Juan Biasonni, de Taller del Sur. Agregó que el acuerdo de estos productos permitirá generar competencia sana con otros bienes de características similares. “La medida moderará aumentos no sólo en la lista acordada sino en los artículos que compiten en el rubro”, apuntó Biasonni. A su vez, Héctor Polino, de Consumidores Libres, consideró que “la nueva iniciativa que impulsa el Gobierno para 2014 es más razonable y sensata que los acuerdos aplicados durante los últimos años”. La Justicia dejó ayer sin efecto la suspensión de la asociación de Polino.

Informe: Federico Kucher.